El Secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS por sus siglas en inglés), Chad F. Wolf, y el Ministro de Seguridad Pública de Panamá, Rolando Mirones, suscribieron este martes una Carta de Intención para la Cooperación en Seguridad con el objetivo de “mejorar los esfuerzos de colaboración de seguridad en ambos países”.
Wolf remarcó que este acuerdo supone “un gran paso adelante para enfrentar los importantes desafíos de seguridad en América Central” e hizo alusión a la crisis migratoria.
“(Panamá) es un punto geográfico natural para los migrantes que vienen al norte desde Sudamérica”, agregó el Secretario estadounidense desde la sede del DHS, donde se selló este documento.
Por eso, considera que este país latinoamericano es “estratégicamente importante para abordar la crisis migratoria que ha estado afectando a casi todo el hemisferio”.
Mejorar la seguridad fronteriza, entre las prioridades
Con todo, Wolf puso de manifiesto su convicción de que Estados Unidos y Panamá puedan hacer frente “a organizaciones criminales transnacionales”, así como también “mejorar la seguridad fronteriza”.
Esta Carta de Intención, según dio a conocer el Departamento de Seguridad Nacional, refleja el compromiso de ambos países para fortalecer la cooperación en seguridad cibernética y la planificación de políticas al respecto, además de mejorar los procesos aduaneros y la eficiencia para facilitar el comercio.
También apoyarán los esfuerzos en seguridad fronteriza para combatir el crimen transnacional y así impedir los flujos migratorios irregulares.
Plan estratégico entre Estados Unidos y Panamá
El documento suscrito por ambos países expresa la “colaboración” para llevar a cabo un “enfoque estratégico regional para la gestión de la migración”.
El comunicado indica que, para Estados Unidos, “Panamá es un socio crucial en la lucha contra la delincuencia organizada” que afecta a varios países, así como también para luchar contra el “narcotráfico, el terrorismo y los problemas fronterizos”.
Así que el país norteamericano espera que este acuerdo minimice el poder de las “organizaciones criminales que operan en la región” y “que se benefician de la trata de personas”, afectando “a las poblaciones más vulnerables”.
"Desarrollar una América Central más segura"
Este documento supone el decimotercer acuerdo firmado entre el DHS y uno de sus socios de Centroamérica. Desde junio, la oficina estadounidense impulsó un plan estratégico para “abordar la migración ilegal, mejorar la seguridad fronteriza, combatir las organizaciones criminales transnacionales y aumentar el desarrollo económico en la región”.
“Con nuestros socios, estamos desarrollando una América Central más segura y más próspera para que los ciudadanos puedan sentir que están creando un futuro en sus respectivos países de origen, en lugar de utilizar contrabandistas que hacen peligroso su travesía hacia el norte”, finaliza el comunicado.