Los horribles atentados terroristas en París han reenfocado la atención de Washington en el grupo Estado islámico y su ambición de atacar en Estados Unidos.
En medio de una efusión mundial de duelo y pena por Francia, el principal demócrata en la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes, Adam Schiff, dijo en el programa “This Week” de ABC que EE.UU. también es un objetivo.
“No podemos permitir que ISIS tenga un santuario en Siria e Irak desde donde planeen y dirijan ataques contra nosotros” indicó Schiff.
Por ahora, funcionarios de la Casa Blanca buscan tranquilizar al público estadounidense. Ben Rhodes, Viceasesor de Seguridad Nacional habló el domingo en el programa “This Week” de ABC.
“No hay una amenaza específica, creíble al país en este momento, pero vamos a estar muy vigilantes” dijo Rhodes.
Los ataques en París demostraron que los terroristas pueden planear, coordinar y ejecutar sangrientos complots con poco o ningún tráfico en internet u otras comunicaciones que puedan alertar a las agencias de inteligencia.
Informes de que uno de los atacantes en París es un sirio solicitante de asilo llevará a un mayor escrutinio de la promesa de la administración Obama de aceptar 10.000 refugiados de Siria.
El candidato republicano a la nominación presidencial Marco Rubio disputó la afirmación de la Casa Blanca de que quienes reciban asilo serán sujetos a una estricta investigación.
“Hay mil personas que vienen y 999 son gente pobre que huye de la opresión y la violencia. Pero uno de ellos es un combatiente de ISIS. Si ese es el caso, tenemos un problema, y no hay forma de examinar eso. No se puede levantar el teléfono y llamar a Siria” indicó Rubio.
En el lado demócrata, la candidata a la nominación presidencial Hillary Clinton estuvo en desacuerdo con la afirmación de Obama la semana pasada de que el grupo Estado islámico ha sido contenido.