El enviado especial del Departamento de Estado para el Triángulo Norte, Ricardo Zuñiga, negó el miércoles en una audiencia ante el Congreso que EE. UU. haya llegado a acuerdos con Guatemala, Honduras y México para que desplieguen más tropas en sus fronteras.
El funcionario de la cartera de Exteriores estadounidense dijo que no se han llegado a acuerdos con gobiernos “sobre seguridad fronteriza”, a pesar de que la Casa Blanca anunció la semana que sí se habían alcanzado dichos convenios.
Tanto Guatemala como Honduras desmintieron también la información poco después de que se conociera. El gobierno guatemalteco hizo énfasis en que no se había firmado ningún documento.
El legislador demócrata Joaquín Castro fue quien preguntó a Zúñiga al respecto, asegurando que el Departamento de Estado había aclarado a su oficina que la información de que se había llegado a acuerdos “no era precisa” y que lo que hubo fue “conversaciones continuas sobre cómo reducir el flujo migratorio”.
La vocera de la Casa Blanca, Jen Psaki, anunció la semana pasada que se había acordado que México mantendría 10.000 soldados en la frontera sur. Mientras que Guatemala instalará 1.500 policías y militares en su frontera con México y acordó establecer 12 puntos de control. Honduras, por su lado, desplazará en su frontera a 7.000 policías y militares.
El gobierno de Guatemala, dijo en un comunicado el miércoles que los “1.500 elementos de las fuerzas de seguridad a los que se hace referencia ”son parte" del despliegue específico que Guatemala anunció ante la llegada de flujos masivos de personas "en enero".
Por su parte el embajador de Honduras en Washington, Luis Suazo, también negó que exista acuerdo alguno para movilizar a cuerpos de seguridad a puntos fronterizos “para frenar la migración irregular hacia territorio estadounidense”.
En este sentido, Psaki se reafirmó este miércoles, si bien se mostró menos contundente al referirse en rueda de prensa a "un anuncio estos pasados días respecto al aumento de personal en las fronteras que estos países están acometiendo".
"En lo que estamos centrados es en ver cómo podemos trabajar con estos países para determinar cómo disuadir lo viajes, disuadir a los migrantes de emprender la travesía", zanjó.
Recientemente la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. (CBP por sus siglas en inglés) dio a conocer que el número de detenciones en la frontera de Estados Unidos con México se disparó un 70% en marzo, alcanzando el nivel más alto en 15 años.
De acuerdo con la institución solo en el mes de marzo fueron detenidas unas 172.331, personas que intentaron cruzar la frontera de forma irregular y la mayoría de estos migrantes provenían de Honduras, El Salvador, Guatemala y México.