El senador republicano, Lindsey Graham, dijo el viernes que habló con el presidente estadounidense Donald Trump, y que se mostró positivo acerca de su estado de salud, horas después del anuncio de que se encuetra en cuarentena tras dar positivo a una prueba de COVID-19.
"Sonaba bien, sonaba optimista", dijo un asistente citando a Graham.
Además explicó el asistente que Trump preguntó sobre los planes de la audiencia de confirmación en el Senado de la nominada a la Corte Suprema Amy Coney Barrett. Los planes para comenzar las audiencias de Barrett el 12 de octubre se mantienen sin cambios por el resultado de la prueba de coronavirus de Trump.
El resultado positivo de Trump, de 74 años, se conoce apenas horas después de que la Casa Blanca anunciara que una de sus asesoras más cercanas, Hope Hicks, contrajo el virus luego de viajar con el presidente varias veces esta semana.
También dio positiva al COVID-19 la primera dama, Melania Trump.
Al hacer el anuncio en la madrugada del viernes, Trump escribió en su cuenta de Twitter: "Comenzaremos nuestro proceso de cuarentena y recuperación de inmediato. ¡Saldremos de esto JUNTOS!".
McConnell: Trump está de "buen humor"
El líder de la mayoría del Senado de Estados Unidos, Mitch McConnell, dijo que habló con Trump por teléfono el viernes y descubrió que estaba de "buen humor" después de dar positivo por coronavirus.
"Está de buen humor y hablamos de negocios", dijo McConnell en un texto publicado en Twitter. Dijo además que discutieron el proceso de confirmación del Senado para la nominada a la Corte Suprema Amy Coney Barrett.
"A todo vapor con el proceso justo, completo y oportuno que merecen la nominada, la Corte y el país", dijo McConnell en el tuit.
En otro tuit, McConnell escribió: "Feliz de escuchar el informe del médico de la Casa Blanca de que
@POTUS y @FLOTUS se sienten bien después de sus pruebas positivas para COVID-19. Continuemos orando hoy y todos los días por nuestro Presidente y nuestra Primera Dama y por todos los afectados por COVID-19.
Se trata de un momento clave cuando falta un mes para las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, en las que Trump aspira a ser elegido para su segundo mandato.
Casi 7,3 millones de personas en Estados Unidos han sido infectadas con COVID-19 y más de 207.000 han muerto, la cifra más alta reportada en el mundo.