Los fuegos forestales en los estados occidentales de California, Oregón y Washington, continuaban ardiendo el viernes, con millones de hectáreas siendo quemadas. Pero un alivio parecía estar en camino.
En Oregón, un alto funcionario de los bomberos dijo que muchos de los incendios “habían desaparecido del mapa”, con lo cual podría reducirse la amenaza.
Según el medio estatal Oregon Public Broadcasting, al menos seis grandes incendios siguen ardiendo.
Pero la madre naturaleza estaría ofreciendo ayuda con significativas lluvias en varias zonas clave.
De hecho, las autoridades suspendieron las labores de rescate en el área de uno de los más grandes incendios debido a las fuertes lluvias, según reportó la agencia de noticias The Associated Press.
En California, se reportó la muerte de un bombero el jueves en una lucha contra el incendio en El Dorado, que fue ocasionado por una fiesta para dar a conocer el sexo de un bebé aún no nacido.
Sin embargo, los pronósticos del tiempo dicen que temperaturas más frescas están por llegar, según el diario Los Angeles Times.
El viernes había más de dos docenas de incendios en California, con más de 17.000 bomberos combatiéndolos.
Unas 24 personas han muerto en esos incendios.