Dentro de 35 años, los países donde casi la mitad de la población mundial reside, pueden enfrentar lo que los científicos catalogan como “alto riesgo y estrés de escasez de agua”.
Esto se traduce en miles de millones de personas teniendo menor acceso a agua que hoy en día.
“Tenemos un oportunidad en tres, de que si no se toma acción para mitigar el clima o controlar los factores que crean este estrés de agua, llegaremos a una situación insostenible a mediados de siglo”, afirma el científico Adam Schlosser del Instituto Tecnológico de Massachusetts.
Schlosser es parte de un equipo científico cuyo reciente estudio pinta un cuadro alarmante.
Los investigadores simularon cientos de futuros escenarios y encontraron que, como promedio, las cuencas que alimentan el crecimiento económico de China e india, tendrán menos agua que la que tienen hoy.
A la vez, dicen que la presión sobre los recursos acuáticos continuará mientras siga el crecimiento poblacional, creando un escenario insostenible, donde el suministro pierde contra la demanda.
“Uno no puede ignorar el efecto del crecimiento poblacional, particularmente al referirse a los recursos existentes”, dijo Adam Schlosser.
Pero, según los científicos, lo que nubla todo es el cambio climático, donde la mayoría de los estudios apuntan hacia un enorme déficit en los recursos de agua, lo que exacerbará el ya oscuro porvenir.