El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo que le está ganando la batalla a Estados Unidos aunque sigue temiendo por una conspiración.
En declaraciones realizadas en la ONU sobre el Agua como Derecho Humano, Morales dijo desde Nueva York que incluso temía viajar a esta conferencia debido a sospechas de que EE.UU. planeaba acusarlo por posesión de drogas.
“Tengo mucho miedo al gobierno de Estados Unidos porque conozco sus operaciones políticas. (…) Es delito hablar de socialismo, de comunismo. Quienes encabezamos luchas sociales, somos terroristas, y últimamente, traficantes. Pero eso nos hace pensar que están preparando algo, que es su deseo implicarnos”, aseguró Morales.
Según el mandatario boliviano, el gobierno estadounidense buscaba poner drogas en su avión presidencial para luego acusarle de posesión de cocaína y dañar su imagen con el objetivo final de removerlo del poder.
“Esperamos que no pase nada. Yo salgo de mi responsabilidad denunciando lo que quieren hacer con Bolivia, con su presidente y con sus ciudadanos”, advirtió el presidente de Bolivia.
Sin embargo, Morales aseguró que a pesar de todo busca “mejorar las relaciones con EE.UU. Pero no queremos relaciones diplomáticas con fines conspirativos. En 2008 expulsamos al embajador estadounidense porque estaba encabezando un movimiento conspirativo. Donde hay un embajador de EE.UU. siempre hay golpes de Estado. El único lugar donde no hay golpes de Estado es en EE.UU., porque EE.UU. no tiene embajadores estadounidenses en su propio país”, argumentó el mandatario boliviano.
Morales dijo no entender “cómo si EE.UU. es un país que promueve la democracia, no pudo hacer respetar la democracia en Honduras, teniendo una base militar dentro de territorio hondureño”.
La salud de Chávez
El presidente de Bolivia también dijo haber hablado por teléfono con su similar de Venezuela Hugo Chávez, a quien escuchó “mucho mejor”.
“(Antes de llegar a Nueva York) pasé por el aeropuerto internacional de Venezuela en Caracas, y desde ahí me comuniqué con él (Chávez), se le escuchaba muy bien, aunque respetando las indicaciones médicas”, dijo Morales.
El líder boliviano se mostró a su vez crítico por las reacciones de júbilo en Estados Unidos, por parte de un grupo que se alegra “por la enfermedad del comandante Chávez”.
“En las calles de EE.UU. estaban festejando. ¿En qué mundo estamos? Por más que seamos opositores, si mi enemigo se enferma yo intento solidarizarme. Pero en EE.UU. celebran”, analizó el presidente, y agregó “ahora que se sane será preocupación para opositores internos y externos”.
