De Palacio Quemado a “moderno palacio”.
El presidente de Bolivia ordenó el 31 de octubre la construcción de un nuevo palacio presidencial para el país andino, llamado la “Casa Grande del Pueblo”.
La instalación tendrá 29 pisos, un helipuerto, estarán inscritos los nombres de las 36 naciones indígenas que componen el Estado y tendrá un auditorio dividido en tres niveles más el escenario, con una capacidad para 1.012 personas.
La iniciativa costará $36 millones de dólares, y estará listo en unos dos años y medio, según la constructora.
“No es un lujo, es para servir mejor al pueblo”, dijo Morales. ‘El palacio actual me pareció una ratonera y quedará como museo del estado colonial”.
El nuevo palacio asemejará los bloques de piedras de los monolitos gigantes de la cultura Tiwanaku y se emplazará detrás de la actual sede de gobierno.
La oposición tildó de “despilfarro” la construcción del nuevo palacio, según agencias de noticias.
