Cinco expresidentes de Estados Unidos dejaron de lado la política y se reunieron por primera vez desde 2013 en un concierto para recaudar fondos en apoyo a las víctimas de los devastadores huracanes que azotaron Texas, Florida, Puerto Rico y las Islas Vírgenes estadounidenses.
Los demócratas Barack Obama, Bill Clinton y Jimmy Carter, así como los republicanos George H.W. Bush y su hijo George W. Bush se reunieron en el escenario el sábado por la noche en la ciudad de College Station, Texas, donde se encuentra la Universidad Texas A&M, en un esfuerzo por unir al país después de las tormentas.
Texas A&M es sede de la biblioteca presidencial de Bush padre. A sus 93 años, el exmandatario padece una forma del mal de Parkinson y se presentó al evento en silla de ruedas. Su esposa Barbara y la de George W. Bush, Laura Bush, estuvieron sentadas en la audiencia.
Lady Gaga, ganadora de un premio Grammy, hizo una aparición sorpresa en el concierto, que también contó con la participación de la banda de música country Alabama, el miembro del Salón de la Fama del Rock & Roll “Soul Man” Sam Moore, la leyenda de la música góspel Yolanda Adams y los músicos texanos Lyle Lovett y Robert Earl Keen.
El concierto respaldado por los expresidentes ha recaudado 31 millones de dólares desde que comenzó el 7 de septiembre, informó Jim McGrath, vocero de George H. W. Bush.
Horas antes, el presidente Donald Trump grabó un saludo en video en el que no menciona las críticas que ha emitido contra los exmandatarios y los llamó “algunos de los mejores servidores públicos de Estados Unidos”.
“Este esfuerzo maravilloso nos recuerda que verdaderamente somos una nación ante Dios, todos unidos por nuestros valores y dedicación de unos por otros”, afirmó Trump en su mensaje.
La primera dama "Melania y yo queremos manifestar nuestro profundo agradecimiento por vuestra increíble colaboración", señaló.
Cuatro de los cinco expresidentes _Obama, George W. Bush, Carter y Clinton_ hicieron breves comentarios que no mencionaron a Trump. Bush padre no habló, pero sonrió y saludó a la multitud. Los exmandatarios hicieron un llamamiento a la unidad nacional para ayudar a los damnificados por los huracanes.
“El corazón de Estados Unidos, sin importar raza, religión o partido político, es más grande que nuestros problemas”, dijo Clinton.
La última vez que los cinco estuvieron juntos fue en 2013, cuando Obama aún era el mandatario, en la ceremonia de inauguración de la biblioteca presidencial de George W. Bush en Dallas.
“Ciertamente que es un triple, si no es que un jonrón, cada vez” que se reúnen, dijo Brandon Rottinghaus, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Houston. “Los presidentes tienen la base más poderosa y prolífica de recaudación de fondos de cualquier político en el mundo. Cuando hacen una exhortación para pedir ayuda, en especial en algo que no es político, pueden recaudar grandes cantidades de dinero”.
El huracán Harvey azotó la costa de Texas en el Golfo de México el 25 de agosto. Con vientos de categoría 4, generó una inundación histórica en Houston y la muerte de más de 80 personas.
Posteriormente el huracán Irma golpeó Florida y el huracán María provocó destrozos en Puerto Rico. Además, ambos afectaron las Islas Vírgenes estadounidenses.
Los cinco exmandatarios subieron al escenario en el momento de cantar el himno nacional y luego se sentaron en la primera fila para presenciar el espectáculo, celebrado en Texas (sur).
Juntos ya han logrando recolectar 31 millones de dólares para los damnificados por Harvey, Irma y María, gracias a la contribución de 80.000 personas, según explicó la oficina de Bush padre.
"Como expresidentes queremos ayudar a nuestros compatriotas estadounidenses a comenzar a recuperarse", dijo Obama en un video proyectado al inicio del concierto.
"La gente está sufriendo aquí, pero tal y como dijo un tejano, tenemos más amor que agua en Texas", aseguró de su lado Bush hijo.
El cantante country Lee Greenwood abrió la velada musical con el tema "Proud To Be an American" (Orgulloso de ser estadounidense).
Harvey arrasó Texas e Irma y María barrieron el sureste de Estados Unidos y parte del Caribe, en especial Puerto Rico, dejando centenares de muertos y damnificados y daños por miles de millones de dólares.
Con información de AP y AFP