La profunda crisis económica desatada por la pandemia del coronavirus requiere de la rápida movilización de toda Fuente de apoyo financiero que ayude a los países a sobrevivir, dijo la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), kristalina Georgieva.
La incertidumbre sobre la emergencia sanitaria y la profundidad del daño económico han impulsado a los gobiernos y líderes del desarrollo a producir nuevos y acelerados métodos de ayuda, con la esperanza de evitar un daño aún más severo.
"Todo debe estar sobre la mesa. Simplemente no sabemos aún cómo la crisis va a evolucionar”, dijo Georgieva.
Con más de dos millones de casos alrededor del mundo, el saldo global de Muertos acercándose a 1,4 millones y cerca de 4.400 millones de personas sujetas a cuarentenas, la pandemia del coronavirus ha frenado la economía mundial.
El Fondo Monetario Internacional pronostica que la economía mundial se reducirá en un 3 por ciento este año, es decir unos 9 billones de dólares, pero algunos especialistas son aún más pesimistas.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) han respondido apresurados con miles de millones de dólares en financiamiento, ayuda humanitaria, y logrando aprobar de las 20 economías más desarrolladas (G20) una prórroga de un año para el pago de las deudas de los países más pobres.
Los gobiernos están pidiendo a los prestamistas privados que hagan lo mismo, y el Instituto de Finanzas Internacionales, la asociación global de bancos, ha avalado la prórroga para los 76 países más empobrecidos del mundo.
Georgieva, quien reconoce que continua la discusión entre los países miembros del Fondo sobre qué pasos adicionales funcionarían mejor, dice que lo crítico es actuar ahora mismo con los recursos que ya estén disponibles.
"Lo que sabemos es que tenemos una fuerte capacidad financiera para actuar ahora y esa velocidad de acción es crucial en esta crisis que se ha movido tan rápido y que se ha profundizado tanto”, dijo al concluir una reunión virtual de los países miembros de la Junta de Gobernadores.
El Fondo está enfocado en “construir un puente” sobre la crisis.
El Fondo tiene más de un billón de dólares de capacidad de préstamos, y ha duplicado sus canales rápidos de financiamiento en crisis, muchos de los cuales alcanzan a los países menos desarrollados, y el miércoles aprobó un nuevo programa crediticio de corto plazo para países con ingresos medianos con buenos historiales de políticas económicas.
Más de 100 países han pedido ayuda, y a finales del mes unos 50 la habrán recibido, dijo Georgieva.
El FMI está buscando fondos adicionales de sus miembros para préstamos concesionales, y ya ha recibido ofrecimientos para cubrir un 70 por ciento de los 17.000 millones que necesita reunir para uno de esos programas.
Japón, Inglaterra, Francia, Australia y Canadá hicieron compromisos firmes el jueves, dijo Georgieva.
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin dijo el jueves que Washington está “actualmente explorando” una posible contribución a dos de los fondos de emergencia.
Mnuchin reconoció que las naciones empobrecidas son especialmente vulnerables y pidió más acción de gobiernos alrededor del mundo para ayudar a amortiguar el impacto, señalando que “la robusta respuesta del FMI y el Banco Mundial no sería posible sin el apoyo comprometido de sus accionistas”.
Existe una “urgente necesidad de que todos los miembros ejecuten extraordinarias medidas fiscales y monetarias para contener las consecuencias de la pandemia y limitar el daño a largo plazo a los países”, dijo Mnuchin en su declaración durante la reunión virtual del FMI y el Banco Mundial.
Asimismo, ”debemos estar listos y acelerar y expandir nuestras políticas de ser necesario en la medida que evolucionen las circunstancias”.
Muchos de los países elegibles para el alivio del pago de deuda están en África, y Georgieva dijo que esa región es “de alta prioridad” para el FMI y el Banco Mundial.
"Estamos conscientes de los riesgos para las partes de África que ya tenían problemas, aún antes del coronavirus, y nos movilizaremos con mucha fuerza” para “salvar vidas, salvar empleos, salvar esperanza y proteger el futuro”, afirmó.
Con información de AFP