El gobierno francés presionará a sus socios en el G7 durante su reunión en Japón este mes, que inicie un proceso "irreversible" para controlar el precio de las nuevas medicinas como parte de una campaña global para hacer más asequibles los fármacos básicos para salvar vidas.
Los países del G7 se reunirán en Ise-Shima, Japón del 26 al 27 de mayo. El tema es de gran interés para el presidente Francois Hollande.
La agencia de noticias Reuters informa que tres fuentes le confirmaron que el tema es parte de la agenda del encuentro y que ministros de salud del grupo continuarán trabajando en el mismo en Kobe, en septiembre, cuando otras partes interesadas como las compañías farmacéuticas potencialmente participarían también.
El creciente costo de las nuevas medicinas ha sido criticado en todo el mundo, y en países en desarrollo se ha exigido una reforma al sistema de patentes para reducir considerablemente el precio de tratamientos vitales.
Las naciones del G7 son sede de las principales empresas fabricantes de medicinas y aunque los gobiernoS están dispuestos a tomar medidas para bajar los costos del cuidado médico, generalmente se muestran renuentes a enfrentarse con sus industrias farmacéuticas.