El gobierno de Venezuela omite información en materia de salud y no notifica a la población sobre los casos de chikungunya que hay en Venezuela.
Esta es la alerta que hacen varias organizaciones civiles como la Red de Epidemiología Nacional, la Sociedad Venezolana de la Salud Pública y el Observatorio Venezolano de la Salud del Centro de Estudios del Desarrollo de la Universidad Central de Venezuela.
“El gobierno no está usando sus propias cifras para informar la existencia de una enfermedad febril aguda. Hay algo tan evidente en la cifra oficial de 1.250.119 casos, en exceso de lo esperado, de acuerdo a las propias proyecciones del ministerio", dijo a la Voz de América el médico epidemiólogo y ex ministro de Sanidad, José Félix Oletta, integrante de la Red de Epidemiología Nacional.
"Le toca al gobierno de qué se trata, para eso son las autoridades en salud”, agregó.
El reporte epidemiológico de la semana del 19 al 25 de octubre del Ministerio de Salud no entrega ninguna información sobre la fiebre por chikungunya.
El mismo boletín indica que no hay otras enfermedades endémicas en Venezuela, a excepción de la malaria y el dengue.
“La hipótesis es que la gran mayoría de esos casos son chikungunya. Lo que vemos en ese reporte es un epidemia,” agregó Oletta.
En Venezuela hay 66.768 casos de dengue y 9.831 de chikungunya, según informó el vicepresidente para el Desarrollo Social y las Misiones, Héctor Rodríguez.
“Luego hay un informe de casos febriles que pudieran llegar a ser por dengue, chikungunya o cualquier otro tipo de enfermedad. Ese normalmente no lo reporto porque no tengo cómo discriminar si tiene que ver con alguna de estas enfermedades”, explicó Rodríguez la semana pasada.
A finales de septiembre, el presidente Maduro anunció la creación de un estado mayor para el combate contra el dengue y chikungunya, pero hasta ahora esta nueva instancia no ha emitido ningún reporte oficial.
Tan solo el 6 de octubre, el gobierno venezolano resolvió declarar la fiebre de chikungunya como evento de notificación obligatoria de parte de establecimientos médicos asistenciales públicos y privados.
Quienes han sido víctimas de la chikungunya, como el hijo de Inilsa Vivas, de 39 años de edad, no han recibido atención médica a pesar de haber acudido a una clínica.
Vivas, quien viven Maracay, a 100 kilómetros al oeste de Caracas, dijo a la Voz de América que el 21 de octubre en la clínica “la doctora le tomó la temperatura, nos informó que no era una emergencia porque él no tenía sangramiento por las encías, ni orina con sangre y otros síntomas y que debíamos esperar 72 horas para dar un diagnóstico”.