El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, confirmó en cadena nacional que el uso de mascarilla es obligatorio sin distinción alguna, incluso dentro de las viviendas para quienes estén en cuarentena; pero eso no es todo, quien lo incumpla, podría terminar pagando una costosa multa.
“El uso de mascarillas con los niveles de protección necesarios en todo espacio o lugar público, establecimientos estatales o públicos, espacio o lugar abierto al público, lugares privados de servicio y acceso restringido y en cualquier clase de transporte o tránsito, su uso es obligatorio incluso dentro de su residencia o vivienda” indicó el mandatario.
Además, fue enfático en que su incumplimiento podría llevar a pagar una multa que va de 7 mil a 20 mil quetzales, lo que equivale a una cifra entre mil y 20 mil dólares americanos aproximadamente, sanción que se basará en una falta al Código de Salud, la Ley de Orden Público o el Código Penal.
Entre otras disposiciones, aseguró que quienes no respeten la cuarentena obligatoria “serán responsables penal y civilmente de las consecuencias que puedan derivar en el contagio a terceros” alcanzando hasta 6 años de prisión.
El distanciamiento social también fue establecido como “obligatorio” respetando una distancia de metro y medio. Además, restringió la movilización de personas mayores de 60 años, argumentando el alto riesgo que corren ante el contagio de COVID-19.
“Se restringe le libertad de locomoción en todo el territorio nacional de personas mayores de 60 años, personas con enfermedades crónicas, mujeres en estado de embarazo y niños, especialmente yendo a los mercados o comercios que están permitidos” aseguró.
Por una semana más están prohibidas las actividades deportivas, culturales, sociales y religiosas y persiste el toque de queda desde las 4 de la tarde a las 4 de la mañana.