El gobierno de Guatemala a través del Consejo Nacional de Atención al Migrante, CONAMIGUA, presenta el jueves una campaña de avisos por radio para advertir acerca de los riesgos que se corren en la ruta para cruzar en forma irregular la frontera hacia Estados Unidos.
La iniciativa tendrá varias fases para después ser pautada en televisión, medios impresos y redes sociales. Busca señalar el peligro que implica ir a parar a manos de los llamados “coyotes”, según lo indicó el secretario de CONAMIGUA, Carlos Narez.
La campaña pretende sensibilizar a la población guatemalteca y desincentivar la migración irregular. Se enfocará principalmente en la región occidental de Guatemala conocida como el “corredor migratorio” de donde sale la mayoría de guatemaltecos por la cercanía con la frontera con México.
Las noticias de guatemaltecos migrantes fallecidos han sido constantes durante los últimos meses. Briseida Pérez, de 20 años, murió junto a su hijo de un año y medio al cruzar la frontera el 23 de junio pasado. Los familiares desconocen cómo pasó, pero saben que su esposo sí logró llegar a Estados Unidos con otra hija de la pareja.
Otra víctima es Juanita, de 3 años, quien murió en brazos de su mamá, Neily. Ambas se perdieron en el desierto sin tener nada para comer y ni agua para beber y eso le provocó la muerte a la menor. Neily fue hospitalizada y se recupera, pero por Juanita nada se pudo hacer.
Antonia Calderas Marroquín, de 26 años, se desmayó cuando cruzaba el desierto junto a su hermano, quien la tuvo que llevar cargada durante tres horas para pedir ayuda a un agente de la patrulla fronteriza. Ella perdió la vida.
Victoria Méndez murió en el desierto de Arizona la semana pasada en una situación similar, bajo un cuadro de deshidratación y cansancio. El más reciente caso es el de un menor de 10 años que fue localizado con vida abrazando el cadáver de su padre, después de ser abandonados por el coyote y secuestrados por un grupo criminal en Morelos, México.