Los candidatos presidenciales demócratas se centraron en la economía estadounidense y en derrotar al grupo Estado islámico en su último debate del año en el estado de New Hampshire, el sábado.
El senador por Vermont Bernie Sanders y la exsecretaria de Estado Hillary Clinton apoyan una coalición para derrotar a ISIS.
Clinton tuvo sus comentarios más enérgicos contra el favorito para la nominación presidencial republicana Donald Trump, calificándolo como el principal reclutador para ISIS.
“La primera línea de defensa contra la radicalización es la comunidad musulmana estadounidense. La gente que deberíamos recibir con beneplácito y trabajar con ella. Me preocupa mucho que la retórica proveniente de los republicanos, particularmente Donald Trump, esté enviando un mensaje a los musulmanes aquí en Estados Unidos y literalmente alrededor del mundo, de que hay un enfrentamiento de civilizaciones, de que hay una especie de complot occidental o aun una guerra contra el Islam, que creo aviva las llamas de la radicalización”.
Sanders fue preguntado durante el debate sobre la violación de la base de datos de Clinton por un miembro de su personal, y se disculpó con ella.
“No solo me disculpo con la secretaria Clinton, y tengo la esperanza de que podamos trabajar juntos en una investigación independiente desde el primer día, quiero disculparme con mis partidarios. Esta no es la clase de campaña que quiero llevar a cabo. Y si encuentro que alguien más estuvo involucrado en esto, también será despedido”.
El exgobernador de Maryland Martin O´Malley expresó preocupación por la seguridad nacional anule la seguridad personal. Dijo que cree que EE.UU. nunca debe renunciar a la privacidad ni a las libertades por una promesa de seguridad.
