El candidato republicano Donald Trump no tuvo reparos para salir al frente durante un mitin en Manchester, New Hampshire, y acusar a Hillary Clinton de “mentirosa” y de liderar el departamento de Estado como “un fondo de cobertura personal”.
“Es difícil de decir dónde la fundación Clinton termina y cuándo empieza el departamento de Estado. Acceso y favores fueron vendidos por dinero”, dijo Trump.
El magnate inmobiliario dijo que la exsecretaria de Estado “vendió su oficina a corporaciones y gobiernos extranjeros traicionando la confianza pública y poniendo en peligro la vida de muchas personas”, expresó durante su discurso.
Trump también rechazó las acusaciones sobre que es un racista y defendió su posición en cuanto a inmigración y seguridad nacional.
En respuesta a las acusaciones de Donald Trump, Hillary Clinton señaló durante en un evento de campaña en Reno, Nevada, que el candidato republicano ha construido su campaña en base al “prejuicio y la paranoia” y citó de qué manera ha cambiado su discurso sobre las minorías a su conveniencia.
"Es difícil creer que alguien, y mucho menos un presidente designado, realmente podría creer todas las cosas que dice”, dijo Clinton, quien añadió que la última "paranoia de Trump" fue hablar sobre su estado de salud.
“Alguien tan desconectado de la realidad no debe nunca estar a cargo en la toma de decisiones, que son tan reales llegado el momento. Esa es otra razón por la cual Donald Trump no está temperamentalmente apto para ser presidente de EE.UU”, reiteró Clinton.