Grandes incendios forestales en el sur de California han sido contenidos en medio de temperaturas más frescas y condiciones de humedad, mientras en otras partes del oeste de Estados Unidos se ha registrado un gran aumento de incendios.
Mejores condiciones climáticas después de una severa ola de calor permitió a los bomberos lograr progreso frente a dos incendios en las Montañas San Gabriel, 32 kilómetros al noreste de Los Ángeles.
Una flota de helicópteros y aviones tanques, al igual que otros recursos, están ayudando a luchar contra las llamas en un área de aproximadamente 19 kilómetros cuadrados.
A pesar de temores de que vientos más fuertes pudiera hacer resurgir el fuego, la contención del incendio se expandió del 10 al 15% el miércoles por la noche.
No ha habido destrucción de viviendas, aunque las llamas llegaron cerca. Más de 850 casas recibieron orden de evacuación a comienzos de esta semana.
En otras partes del oeste de Estados Unidos, un incendio en un bosque en el límite entre Colorado y Wyoming aumentó su tamaño y forzó a la evacuación que quienes acampaban en el lugar.
En el suroeste de Utah, un incendio forzó a la evacuación de por lo menos 185 casas en el poblado de Pine Valley.
En el este de Arizona, se espera que los bomberos impidan la expansión de un incendio forestal de unos 173 kilómetros cuadrados y se aproxime a un poblado rural.
Más de 15.000 personas en comunidades montañosas en las cercanías han sido advertidos de que se preparen para la evacuación.