El avión indonesio de pasajeros que desapareció hace dos días se destruyó por completo al estrellarse contra una montaña y las 54 personas que iban a bordo murieron, dijo el martes el responsable de búsqueda y rescate en el país.
Los rescatistas no llegaron al lugar del siniestro hasta el martes, tras luchar contra un terreno escarpado y boscoso y el mal tiempo.
"El avión estaba totalmente destruido y todos los cuerpos estaban calcinados y difíciles de identificar", dijo a Associated Press el responsable de la Agencia Nacional de Búsqueda y Rescate, Henry Bambang Soelistyo. "No hay posibilidad de que sobreviviera nadie".
Por el momento se había registrado 53 cuerpos, señaló, que se trasladaron para su identificación a la capital de la provincia de Papúa, Jayapura.
También se recuperó la caja negra del avión de Trigana Air, señaló Soelistyo. Este dispositivo contiene datos sobre el funcionamiento del avión y podría arrojar pistas sobre la causa exacta del suceso.
Los equipos de rescate habían localizado el lunes desde el aire los restos humeantes del avión turbohélice de Trigana Air Service en una zona escarpada en la provincia de Papúa, la más oriental del país.
El avión ATR42-300 volaba con mal tiempo desde Jayapura a la ciudad de Oksibil cuando perdió el contacto con tierra.
El avión transportaba a 49 pasajeros y cinco tripulantes en un vuelo con una duración prevista de 42 minutos. Entre los pasajeros había cinco niños, dos de ellos bebés.