142 cardenales de la Iglesia Católica iniciaron este lunes la primera de dos Congregaciones Generales para determinar los asuntos más importantes que la Iglesia debe afrontar y por ende el nuevo Papa, para conocerse mejor e interactuar y hacerse una idea de quiénes podrían ser los candidatos a ocupar el Trono de San Pedro, y para determinar la fecha del Cónclave.
En conferencia de prensa en El Vaticano, el vocero en idioma español, el padre Federico Lombardi informó que 142 de los 207 cardenales y obispos que deben participar en estas reuniones preparatorias del Cónclave se encuentran en El Vaticano y 65 están ausentes.
Según indicó el padre Lombardi, 115 cardenales participarán en el Cónclave para elegir al nuevo pontífice, todos deben ser menores de 80 años.
De ellos, han llegado a Roma 103 y dos estarán ausentes. Uno es el cardenal de Indonesia Julius, quien está enfermo y el cardenal de Escocia, Keith O'Brien, quien renunció hace poco y está involucrado en un escándalo sexual.
La mañana la iniciaron los cardenales con un rezo para invocar la ayuda del Espíritu Santo y luego recibieron las explicaciones que prevé la Constitución Apostólica sobre el funcionamiento de estas reuniones.
Hay traductores en cinco idiomas: italiano, inglés, español, francés y alemán, quienes ayudan a los cardenales. Estos traductores han hecho un juramento especial para poder trabajar en las Congregaciones Generales.
Los cardenales hicieron un juramento general presidido por el Decano del Colegio Cardenalicio, Angelo Sodano, luego uno a uno hicieron un juramento individual acercándose a la mesa presidencial, sosteniendo un crucifijo con una mano y poniendo la otra sobre la Biblia en el que prometieron guardar confidencialidad sobre todo lo que suceda y se diga durante estas reuniones de las congregaciones, según establece el Artículo 12 de la Constitución Apostólica de la Sede Vacante.
Según la Constitución, un grupo de tres cardenales está supuesto a trabajar estrechamente con el Decano durante las Congregaciones. Estos nombres se determinan por medio de un sorteo y su tarea dura solo tres días, después de los cuales se elegirán otros tres asistentes.
Cada uno de estos asistentes representa a las tres órdenes del Colegio Cardenalicio, estos son: los cardenales, los obispos y los diáconos. Ellos forman una especie de consejo que asesora al Decano.
El vocero del Vaticano dijo que la primera congregación general se está realizando en un clima cordial, constructivo y muy sereno. Expresó también que los cardenales han decidido enviar un mensaje al Papa Emérito.
En la reunión de esta mañana ya intervinieron 13 cardenales dijo Lombardi, quien añadió que no se determinará la fecha del cónclave hasta que estén aquí todos los cardenales.
Los cardenales tienen un receso de 30 minutos para conocerse e interactuar y luego en la reunión de la tarde se espera que hable el Predicador de la Casa Pontificia, Rainiero Cantalamesa. También se realizan durante las Congregaciones dos meditaciones.
Los cardenales están reunidos de acuerdo a su orden, los diáconos, los obispos y los cardenales.
No habrá informe a la prensa sobre la reunión de la tarde, y solo se informará en caso de que hubiera alguna noticia importante, señaló el padre Lombardi.
En conferencia de prensa en El Vaticano, el vocero en idioma español, el padre Federico Lombardi informó que 142 de los 207 cardenales y obispos que deben participar en estas reuniones preparatorias del Cónclave se encuentran en El Vaticano y 65 están ausentes.
Según indicó el padre Lombardi, 115 cardenales participarán en el Cónclave para elegir al nuevo pontífice, todos deben ser menores de 80 años.
De ellos, han llegado a Roma 103 y dos estarán ausentes. Uno es el cardenal de Indonesia Julius, quien está enfermo y el cardenal de Escocia, Keith O'Brien, quien renunció hace poco y está involucrado en un escándalo sexual.
La mañana la iniciaron los cardenales con un rezo para invocar la ayuda del Espíritu Santo y luego recibieron las explicaciones que prevé la Constitución Apostólica sobre el funcionamiento de estas reuniones.
Hay traductores en cinco idiomas: italiano, inglés, español, francés y alemán, quienes ayudan a los cardenales. Estos traductores han hecho un juramento especial para poder trabajar en las Congregaciones Generales.
Los cardenales hicieron un juramento general presidido por el Decano del Colegio Cardenalicio, Angelo Sodano, luego uno a uno hicieron un juramento individual acercándose a la mesa presidencial, sosteniendo un crucifijo con una mano y poniendo la otra sobre la Biblia en el que prometieron guardar confidencialidad sobre todo lo que suceda y se diga durante estas reuniones de las congregaciones, según establece el Artículo 12 de la Constitución Apostólica de la Sede Vacante.
Según la Constitución, un grupo de tres cardenales está supuesto a trabajar estrechamente con el Decano durante las Congregaciones. Estos nombres se determinan por medio de un sorteo y su tarea dura solo tres días, después de los cuales se elegirán otros tres asistentes.
Cada uno de estos asistentes representa a las tres órdenes del Colegio Cardenalicio, estos son: los cardenales, los obispos y los diáconos. Ellos forman una especie de consejo que asesora al Decano.
El vocero del Vaticano dijo que la primera congregación general se está realizando en un clima cordial, constructivo y muy sereno. Expresó también que los cardenales han decidido enviar un mensaje al Papa Emérito.
En la reunión de esta mañana ya intervinieron 13 cardenales dijo Lombardi, quien añadió que no se determinará la fecha del cónclave hasta que estén aquí todos los cardenales.
Los cardenales tienen un receso de 30 minutos para conocerse e interactuar y luego en la reunión de la tarde se espera que hable el Predicador de la Casa Pontificia, Rainiero Cantalamesa. También se realizan durante las Congregaciones dos meditaciones.
Los cardenales están reunidos de acuerdo a su orden, los diáconos, los obispos y los cardenales.
No habrá informe a la prensa sobre la reunión de la tarde, y solo se informará en caso de que hubiera alguna noticia importante, señaló el padre Lombardi.
