El Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) ha declarado por primera vez a la libertad de expresión por internet como un derecho de las personas.
La resolución, lanzada por Suecia y patrocinada por Estados Unidos, Brasil, Nigeria, Turquía y Túnez incluye una petición a todos los países para que protejan estos derechos.
"Es la primera resolución de la ONU afirmando que los derechos humanos en el ámbito digital deben ser protegidos y promovidos en la misma medida y con el mismo compromiso que los derechos humanos en el mundo físico", dijo Eileen Donahoe, embajadora de EE.UU. ante el organismo.
Tanto Cuba como China han respaldado la resolución, pese a haber expresado ciertas reservas en sus discursos.
El representante chino defendía que proteger la red de los “sitios web dañinos”, es un proceso interdependiente con el de la libertad de expresión en línea.
"A medida que Internet se desarrolla rápidamente, los juegos de azar en línea, la pornografía, la violencia, el fraude y la piratería están aumentando su amenaza a los derechos legales de la sociedad y el público", defendió el enviado chino Xia Jingge.
El papel de internet en los regímenes autoritarios
Precisamente el representante de Túnez Moncef Baati destacó como “la base de la revolución en su país siempre fue conseguir la libertad de expresión”. “La importancia de las redes sociales en la revolución de Túnez, redobla el compromiso de los tunecinos con la libertad de expresión”, aseguró Baati.
La alta capacidad movilizadora que demostraron tener las redes sociales en la Primavera Árabe, ha desatado una oleada de mayor y más compleja represión por parte de regímenes autoritarios como el cubano, según denunciaron numerosos disidentes.
La firma de Cuba en este acuerdo, que no solo reconoce, sino que pide a los firmantes promover la libertad de expresión en internet, levanta las dudas sobre cómo evolucionará el régimen, más allá de haber firmado el documento. El personal de la misión diplomática cubana ante las instituciones de la ONU en Ginebra, no ha sido muy útil a la hora de despegar esta duda, pues se ha negado a contestar a las preguntas de la Voz de América sobre su apoyo a esta declaración.
Preguntado por un periodista iraní, sobre cómo afectaría la declaración a la censura en regímenes autoritarios, el embajador sueco, confiaba en poder mejorar las condiciones en el futuro, “con un poco de suerte, esta declaración nos puede ayudar a llegar a los objetivos de la libertad de expresión y la accesibilidad de la red” dijo el representante.
La resolución, lanzada por Suecia y patrocinada por Estados Unidos, Brasil, Nigeria, Turquía y Túnez incluye una petición a todos los países para que protejan estos derechos.
"Es la primera resolución de la ONU afirmando que los derechos humanos en el ámbito digital deben ser protegidos y promovidos en la misma medida y con el mismo compromiso que los derechos humanos en el mundo físico", dijo Eileen Donahoe, embajadora de EE.UU. ante el organismo.
Tanto Cuba como China han respaldado la resolución, pese a haber expresado ciertas reservas en sus discursos.
El representante chino defendía que proteger la red de los “sitios web dañinos”, es un proceso interdependiente con el de la libertad de expresión en línea.
"A medida que Internet se desarrolla rápidamente, los juegos de azar en línea, la pornografía, la violencia, el fraude y la piratería están aumentando su amenaza a los derechos legales de la sociedad y el público", defendió el enviado chino Xia Jingge.
El papel de internet en los regímenes autoritarios
Precisamente el representante de Túnez Moncef Baati destacó como “la base de la revolución en su país siempre fue conseguir la libertad de expresión”. “La importancia de las redes sociales en la revolución de Túnez, redobla el compromiso de los tunecinos con la libertad de expresión”, aseguró Baati.
La alta capacidad movilizadora que demostraron tener las redes sociales en la Primavera Árabe, ha desatado una oleada de mayor y más compleja represión por parte de regímenes autoritarios como el cubano, según denunciaron numerosos disidentes.
La firma de Cuba en este acuerdo, que no solo reconoce, sino que pide a los firmantes promover la libertad de expresión en internet, levanta las dudas sobre cómo evolucionará el régimen, más allá de haber firmado el documento. El personal de la misión diplomática cubana ante las instituciones de la ONU en Ginebra, no ha sido muy útil a la hora de despegar esta duda, pues se ha negado a contestar a las preguntas de la Voz de América sobre su apoyo a esta declaración.
Preguntado por un periodista iraní, sobre cómo afectaría la declaración a la censura en regímenes autoritarios, el embajador sueco, confiaba en poder mejorar las condiciones en el futuro, “con un poco de suerte, esta declaración nos puede ayudar a llegar a los objetivos de la libertad de expresión y la accesibilidad de la red” dijo el representante.