El abogado de una mujer de Irán sentenciada a morir mediante apedreamiento señala que las autoridades iraníes podrían haber obligado a su cliente a confesar.
En una transmisión televisiva, una mujer que dice ser Sakineh Mohammadi Ashtiani dijo que fue cómplice del asesinato de su esposo. La mujer también confesó haber cometido adulterio, un cargo que ella había negado anteriormente.
Durante la entrevista, la mujer tuvo la mayor parte del rostro cubierto por un velo negro, y la televisión iraní puso un efecto borroso en la mayor parte de su imagen, haciendo imposible verificar su identidad.
El abogado de Ashtiani dijo al periódico The Guardian, que su cliente había sido torturada durante dos días, antes de la entrevista.
Ashtiani inicialmente fue condenada a morir por apedreamiento, luego de ser sentenciada por haber tenido relaciones ilícitas con dos hombres, después de la muerte de su marido.
Pero luego de protestas internacionales, Irán acordó dejar sin efecto la muerte de Ashtiani por apedreamiento. De ser hallada culpable podría ser ahorcada.
