Los restos de Michael Jackson ya descansan en paz pero su nombre sigue causando polémica en cualquier parte del mundo.
Esta vez fue la prensa londinense quien presionó fuerte para que los organizadores de un concierto homenaje al rey del pop cancelaran a sólo días de la fecha esperada.
El evento estaba previsto para el 26 de septiembre en Viena, pero un aluvión de críticas cayó sobre el promotor acusando la falta de estrellas reconocidas para el recital y sentenciando que el evento sería un fracaso.
Georg Kindel, organizador, anunció en rueda de prensa en Viena que el concierto se aplazará pero no se suspenderá. Según Kindel ya se tienen negociaciones adelantadas con los encargados del estadio Wembley, en Londres, para realizar el concierto allí el próximo año “justo antes de lo que será el primer aniversario de la muerte de Jackson”.
El hermano mayor de los Jacksons, Jermaine, salió a la defensa de Kindel y dijo que el show continuará y será tal como su hermano hubiese querido que fuera.
“Debemos hacerlo bien. Queremos (contratar) las estrellas y para ello hemos aplazado (el concierto). Queremos hacerlo al mismo nivel al que él lo hubiera hecho”, señaló el también cantante.
Kindel anunció que el dinero de las entradas ya vendidas por internet para el evento -unas 40.000, según los organizadores, aunque algún medio ha dicho las ha cifrado en 10.000- será reembolsado por completo.
La venta de entradas para el concierto de Londres, que se celebrará previsiblemente el 5 de junio de 2010, comenzará el uno de diciembre y se espera que se anuncie antes de esa fecha el nombre de las estrellas que participarán en el homenaje.