El jefe de la OTAN, Mark Rutte, dijo el martes que confía en que toda la ayuda militar que los aliados puedan aportar a Ucrania en los próximos meses se proporcionará, al tiempo que advirtió que Rusia está utilizando nuevamente la llegada del invierno como arma en su guerra en Ucrania.
Rutte dijo a los periodistas en Bruselas antes de las conversaciones con los ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN que existe una prioridad en la protección de la infraestructura energética ucraniana y en asegurar que las fuerzas ucranianas tengan las defensas aéreas necesarias para defenderse de los ataques rusos.
Además de la guerra en Ucrania, los ministros de Asuntos Exteriores también están discutiendo lo que Rutte dijo que era una "campaña creciente" de acciones hostiles rusas hacia los países de la OTAN, incluidos actos de sabotaje y delitos cibernéticos.
El Ejército de Ucrania dijo el martes que derribó 29 de los 50 drones que Rusia lanzó en su última ronda de ataques nocturnos.
Las intercepciones tuvieron lugar en las regiones de Chernihiv, Donetsk, Járkov, Khmelnytskyi, Kyiv, Mykolaiv, Poltava, Sumy y Ternopil, dijo la fuerza aérea ucraniana.
Las autoridades de Járkov informaron de que un dron derribado causó daños en un negocio, mientras que las autoridades de Sumy dijeron que los bombardeos rusos dañaron varios edificios.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo el martes que derribó 24 drones ucranianos durante la noche y otros 11 drones a primera hora del martes.
Las autoridades de la región rusa de Riazán dijeron que un dron dañó cuatro casas, pero no causó víctimas.
Los drones ucranianos también fueron derribados en las regiones de Rostov, Bryansk, Belgorod, Krasnodar, Kursk y Kaluga, dijo el ministerio.
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