El secretario de Defensa de Estados Unidos, Jim Mattis, dijo el jueves durante su visita a Ucrania que Rusia está buscando “redibujar las fronteras internacionales por la fuerza” y que las sanciones estadounidenses contra Moscú continuarán en efecto hasta que el gobierno ruso cambie su conducta.
Mattis habló junto al presidente ucraniano, Petro Poroshenko, después de reunirse con él y otros líderes en Kiev.
El jefe del Pentágono reiteró el apoyo de EE.UU. a Ucrania y sus fuerzas armadas, y dijo que Washington no acepta la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014. Agregó que la administración Trump está considerando seriamente el envío de armas letales a Ucrania.
“Acabamos de aprobar, muy recientemente, hace un par de semanas, otros 175 millones de dólares en equipos incluyendo algún equipo especializado que puede ser usado para defender el país, lo que lleva el total a casi 750 millones de dólares en años recientes”, indicó Mattis. “Me gustaría destacar que en lo relacionado a armas letales, estamos activamente resisándolo”.
La administración Obama sostenía que la venta de armas de defensa letales a Ucrania provocaría innecesariamente a Rusia, pero la administración Trump ha reabierto la consideración de un plan previamente rechazado.
Cuando se le preguntó a Mattis si Rusia podría ver tal medida como una amenaza, respondió que “las armas de defensa no son provocativas a menos que se trate de un agresor”.
El presidente Poroshenko no respondió directamente cuando se le preguntó sobre un cronograma para cualquier transferencia de armas, pero destacó que las armas de defensa “aumentarían el precio si Rusia toma la decisión de atacar mis tropas y mi territorio”.
