El Comité Olímpico Internacional (COI) se abstuvo de vetar la participación de Rusia en los Juegos Olímpicos de Rio y dejó en manos de las federaciones internacionales de cada deporte cualquier posible sanción.
La decisión significa que cada federación debe determinar de manera individual la elegibilidad de cada atleta ruso. No está claro si las federaciones tienen los recursos suficientes para hacerlo antes de que comiencen los juegos, el 5 de agosto.
Los únicos que continúan vetados completamente son los atletas de pista y campo, en consonancia con la decisión de la Asociación de Federaciones de Atletismo (IAAF).
Funcionarios de las agencias antidopaje, lideres deportivos y atletas —en su mayoría de Europa y América del Norte— habían pedido prohibir la total participación rusa en las olimpiadas luego de que se presentó más evidencia de la injerencia estatal rusa en un amplia trama de dopaje de sus atletas y de los esfuerzos por ocultarla.
Algunas federaciones internacionales como la de natación, lucha y voleibol, ya se han manifestado contrarias al veto total pese al altísimo número de positivos entre los atletas rusos.
Rusia obtuvo el cuarto puesto en el medallero de los Juegos de Londres.
