El secretario de Estado John Kerry dijo en Juba, la capital de Sudán del Sur, que la violencia en ese país está a punto de convertirse en genocidio.
Su advertencia ha sido la más directa desde que esa nación, que Estados Unidos ayudó a establecer, entró en riesgo de convertirse en un país fallido.
Kerry se reunió este viernes con el presidente Salva Kiir y planeaba hablar por teléfono con el exvicepresidente y líder rebelde Riek Machar. El jueves, el secretario Kerry culpó a la rivalidad entre ambos por la violencia en Sudán del Sur.
Kerry dijo que Kiir expresó estar dispuesto a tomar medidas para terminar la violencia y dispuesto a viajar a Addis Abeba para entrar en conversaciones "ojalá" directamente con Machar.
El jueves, el secretario de Estado había dicho que coincidía con el comisionado de las Naciones Unidas que habló sobre una potencial hambruna en el país si no se detiene la violencia.
"Me hago eco de esa advertencia, pero yo iría aún más allá y recalcaría que una violencia personal, un enojo personal entre dos líderes nunca debería permitirse que lleve a toda una nación en la dirección que Sudán del Sur está actualmente yendo…hacia abajo", agregó.
El secretario Kerry instó a ambos dirigentes a condenar los brutales ataques contra gente inocente. Kerry trata de negociar un acuerdo para enviar tropas de paz de la Unión Africana tan pronto sea posible para ayudar a detener los enfrentamientos y proteger a los civiles.
Estados Unidos ha amenazado con sanciones contra los responsables de la violencia, incluidos el presidente Kiir y el expresidente Machar.
Su advertencia ha sido la más directa desde que esa nación, que Estados Unidos ayudó a establecer, entró en riesgo de convertirse en un país fallido.
Kerry se reunió este viernes con el presidente Salva Kiir y planeaba hablar por teléfono con el exvicepresidente y líder rebelde Riek Machar. El jueves, el secretario Kerry culpó a la rivalidad entre ambos por la violencia en Sudán del Sur.
Kerry dijo que Kiir expresó estar dispuesto a tomar medidas para terminar la violencia y dispuesto a viajar a Addis Abeba para entrar en conversaciones "ojalá" directamente con Machar.
El jueves, el secretario de Estado había dicho que coincidía con el comisionado de las Naciones Unidas que habló sobre una potencial hambruna en el país si no se detiene la violencia.
"Me hago eco de esa advertencia, pero yo iría aún más allá y recalcaría que una violencia personal, un enojo personal entre dos líderes nunca debería permitirse que lleve a toda una nación en la dirección que Sudán del Sur está actualmente yendo…hacia abajo", agregó.
El secretario Kerry instó a ambos dirigentes a condenar los brutales ataques contra gente inocente. Kerry trata de negociar un acuerdo para enviar tropas de paz de la Unión Africana tan pronto sea posible para ayudar a detener los enfrentamientos y proteger a los civiles.
Estados Unidos ha amenazado con sanciones contra los responsables de la violencia, incluidos el presidente Kiir y el expresidente Machar.