La migración de venezolanos no ha aumentado e incluso se ha reducido en algunas fronteras de su país después de la controvertida elección presidencial de julio, que derivó en denuncias de fraude, cientos de arrestos y protestas de calle, de acuerdo con la plataforma R4V.
R4V, una plataforma de coordinación interagencial para refugiados y migrantes donde hacen parte más de 200 organizaciones, ONG y agencias de las Naciones Unidas, concluyó en un informe especial que los movimientos migratorios de venezolanos han permanecido en “niveles significativamente bajos” en comparación con los días previos a la elección del 28 de julio.
Destaca en su reporte que no descarta actualizar en breve, que los puntos fronterizos entre Venezuela y sus países vecinos abrieron regularmente el lunes 29 de julio, luego de permanecer cerrados durante la votación, donde resultó proclamado ganador el presidente Nicolás Maduro.
La oposición denunció fraude en la elección, mientras se reportaron manifestaciones populares en al menos 200 ciudades y poblados de Venezuela por el resultado. Parte de la comunidad internacional confiaba en que esa votación fuera un punto de inflexión para zanjar la prolongada crisis integral del país, de donde han migrado 7,7 millones de personas.
R4V precisó que la cantidad de venezolanos que se moviliza hacia Brasil tiende a “estabilizarse” después de varios días de “aumento gradual”: el 5 de agosto, ingresaron 353 venezolanos a Brasil. Antes de la elección, el promedio diario era de 350.
Preocupados por las protestas y la violencia
Según los registros de R4V, más de la mitad de los venezolanos que se movilizaron recientemente a Brasil piensan permanecer en ese país. Sus mayores preocupaciones son las protestas contra el resultado de la elección, las oportunidades laborales y el miedo a violencia o inseguridad.
Según el monitoreo de la plataforma, los movimientos de venezolanos hacia Colombia permanecieron “en niveles bajos” y los desplazamientos hacia Ecuador fueron incluso más bajos que lo regular.
En Perú y Chile, no se observaron movimientos “inusuales” de población, si bien los gobiernos de esas naciones incrementaron sus medidas de control fronterizo. Los socios de R4V indican que 7 de cada 10 venezolanos migrantes lo hacen por los disturbios en marcha y por miedo a que la situación del país empeore.
Según asociaciones civiles y voceros de la oposición venezolana, las fuerzas de seguridad han detenido a más de 1.000 personas y hubo 24 muertes durante la crisis postelectoral. El gobierno, por su parte, dice haber detenido a más de 2.000 “terroristas”.
Algunas recomendaciones de R4V para los países de la región es que ayuden a mitigar los retos de la población venezolana migrante al reconocer o extender el reconocimiento de pasaportes y documentos de identidad vencidos y revisar las actuales fechas de expiración de programas de regularización de venezolanos.
Además, llamó a los gobiernos a reconsiderar sus planes de retorno de venezolanos a su país y pidió dotar a los refugiados y migrantes de ayuda humanitaria “urgente”, servicios de protección y oportunidades de integración socioeconómica.
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