Un incremento sin precedentes de la violencia de las pandillas está asolando Haití, donde el número de víctimas mortales, heridos y secuestrados se duplicó con creces el año pasado, informó el jueves la enviada especial de la ONU para la nación caribeña.
“No puedo exagerar la gravedad de la situación en Haití, donde múltiples crisis prolongadas han alcanzado un punto crítico”, declaró María Isabel Salvador en una sesión informativa ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
Afirmó que las 8.400 víctimas de la violencia de pandillas documentadas por su oficina de la ONU el año pasado —un aumento del 122 % respecto a 2022— fueron principalmente objetivo de pandillas de la capital, Puerto Príncipe.
Se calcula que unas 300 pandillas controlan el 80 % de la capital y que fueron responsables del 83 % de los asesinatos y lesiones del año pasado, según Salvador. Además, añadió que sus tentáculos se han extendido hacia el norte, a la región de Artibonito, considerada el granero de Haití, mientras que hacia el sur de la capital “las pandillas llevaron a cabo ataques a gran escala para controlar zonas clave”, utilizando sistemáticamente la violencia sexual para ejercer el control.
La sesión informativa se celebró más de tres meses después de que el Consejo de Seguridad aprobara el despliegue de una fuerza armada multinacional encabezada por Kenia para ayudar a controlar la violencia de las pandillas.
Pero el despliegue de fuerzas de seguridad kenianas ha enfrentado diversos obstáculos. Finalmente, el Parlamento keniano dio luz verde al despliegue. Y el embajador de Kenia ante la ONU, Martin Kimani, dijo al Consejo que el viernes se anunciaría el veredicto de un tribunal en un caso incoado por un particular que pretendía bloquear el despliegue.
Las autoridades kenianas dijeron a The Associated Press el mes pasado que, si el tribunal permite el despliegue, se espera que el primer grupo de unos 300 policías llegue a Haití en febrero. La contribución de Kenia ascendería en última instancia a 1.000 policías al frente de una fuerza multinacional de 3.000 efectivos. Burundi, Chad, Senegal, Jamaica y Belice han prometido tropas para la misión multinacional.
La Policía Nacional de Haití no puede hacer frente a las pandillas. Menos de 10.000 policías están de servicio permanentemente en un país de más de 11 millones de habitantes. Lo ideal sería que hubiera unos 25.000 policías en activo, según la ONU.
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