Un grupo de legisladores conservadores estadounidenses votó el martes en contra de un compañero republicano, Kevin McCarthy, quien aspiraba a convertirse en el próximo presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, rechazando su candidatura en hasta tres rondas de votación al inicio de la 118ª sesión del Congreso.
Fue la primera vez en 100 años que ni un republicano ni un demócrata ganaron la presidencia de la Cámara de Representantes en la primera ronda de votación para convertirse en el líder de la Cámara Baja, que cuenta con 435 miembros.
McCarthy tampoco pudo ganar la presidencia en la segunda ronda de votación, con 19 republicanos oponiéndose a él en ambas rondas de votación. En una tercera ronda, otro legislador conservador acabó también dando la espalda al congresista californiano. El proceso volverá a retomarse el miércoles, con una nueva consulta.
Los republicanos tendrán una estrecha mayoría de 222-212 en la Cámara de Representantes, con una vacante actual, lo que requerirá que McCarthy, un legislador de California durante 16 años, gane al menos 218 votos para reclamar la presidencia.
Pero 19 republicanos, muchos de los cuales en las últimas semanas expresaron la opinión de que McCarthy no era lo suficientemente conservador como para liderar al partido en la Cámara Baja, optaron por abstenerse o apoyar otras candidaturas republicanas, incluidas las de los representantes Andy Biggs de Arizona y Jim Jordan de Ohio, dos acérrimos críticos del presidente demócrata Joe Biden.
En la segunda ronda de votación, los 19 republicanos disidentes votaron por Jordan, a pesar de que nominó a McCarthy como su elección para liderar el caucus republicano mayoritario en la nueva sesión de dos años de la Cámara de Representantes.
El representante demócrata Hakeem Jeffries de Nueva York, con los 212 demócratas votando por él de manera consistente, en realidad lideró la votación para la presidencia en las tres consultas, aunque no tiene ninguna posibilidad de ganar porque ningún republicano planea votar por él.
En las dos primeras votaciones, 203 republicanos votaron por McCarthy, 15 menos de los 218 que necesitaba. En la tercera, fueron solo 202.
McCarthy, de 57 años, es un conservador que ha buscado durante años liderar la Cámara de Representantes. En las últimas semanas, se ha reunido repetidamente con sus enemigos republicanos para asegurar su apoyo a su candidatura a la presidencia.
McCarthy ofreció cambiar las reglas de gobierno de la Cámara de varias maneras, incluso para permitir votaciones anticipadas para declarar vacante el cargo de presidente y seleccionar a otra persona si no gustaban sus posturas políticas o cómo la dirección del partido estaba llevando a cabo sus investigaciones prometidas de Biden y su administración.
Pero a medida que se desarrollaban las tres largas votaciones nominales, se hizo evidente que McCarthy no tenía suficientes votos para ganar la mayoría.
Quienquiera que los republicanos finalmente elijan, McCarthy u otra persona, reemplazaría a la presidenta demócrata saliente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, quien sigue siendo miembro de la Cámara y emitió sus votos por Jeffries.
Los demócratas, que han estado atrapados en una división de 50-50 con los republicanos en el Senado en los últimos dos años, obtuvieron una ventaja en las elecciones legislativas nacionales hace casi dos meses y tendrán una mayoría de 50-49 en el nuevo Congreso, incluso cuando la exsenadora demócrata Kyrsten Sinema anunció que ahora será independiente, pero que no cambiaría su filosofía de voto. Por lo general, ha votado con los legisladores demócratas y Biden.
McCarthy ganó 188 votos en un caucus republicano de la Cámara de Representantes en noviembre, y desde entonces se ha asegurado más apoyo en su esfuerzo por alcanzar la mayoría de 218 votos para la presidencia, como lo demuestran los más de 200 votos que cosechó en las tres votaciones el martes.
Pero el grupo de extrema derecha de republicanos de la Cámara de Representantes se opone a la candidatura de McCarthy para el cargo de presidente porque dicen que no se ha dedicado lo suficiente a la causa conservadora y representa lo que consideran un liderazgo republicano fallido con Biden en la Casa Blanca, presionando para que se aprueben políticas sociales progresistas y planes de gasto federal a los que la mayoría de los republicanos se oponen.
La elección de un presidente de la Cámara de Representantes ocurre incluso antes de que los representantes presten juramento en el cargo por sus términos de dos años. Los legisladores llamaron el nombre de su elección para presidente de la Cámara de Representantes desde el piso de la cámara, y el mismo escenario se desarrollará en la tercera ronda de votación, y posiblemente más allá de eso.
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