Los legisladores estadounidenses Marco Rubio y Mario Díaz-Balart están indignados ante las recientes acusaciones del gobierno de Nicolás Maduro contra la excongresista y líder opositora María Corina Machado.
En un comunicado el senador Marco Rubio de la Florida señaló que las acusaciones contra María Corina Machado de conspirar contra la vida del presidente Maduro son una “parodia” y son “irrisorias”.
Además agregó Rubio que este tipo de acusaciones solo son posibles en un país donde “las cortes son arregladas, los jueces son peones del gobierno y la justicia es imposible de alcanzar”.
Por su parte el congresista Mario Díaz-Balart criticó los cargos impuestos a María Corina Machado, quien fue destituida de su cargo y se le impidió salir de Venezuela.
Díaz-Balart catalogó las acciones de Maduro y “sus secuaces” de “ridículas”. “Con estas acciones el régimen de Maduro demuestra que es corrupto y tiránico como han advertido líderes de la oposición como María Corina Machado”, argumentó el congresista.
Ambos legisladores coinciden en que Estados Unidos debe imponer sanciones más severas contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Por un lado el senador Rubio pidió al presidente Barack Obama que utilice su autoridad existente para imponer “inmediatamente sanciones financieras a las personas involucradas en este tipo de parodias, así como a otras que han estado violando los derechos humanos desde febrero de 2014”, resaltó Rubio en un comunicado.
A su vez, el Departamento de Estado manifestó su preocupación por los cargos a Machado y a otros opositores venezolanos que se enfrentan a la justicia.
De igual manera, Díaz-Balart indicó que la Cámara de Representantes ha demostrado un fuerte respaldo para imponer sanciones más estrictas contra el régimen de Maduro, y que ya es tiempo que el Senado y el presidente de EE.UU. hagan lo mismo.