Las fuerzas rebeldes lograron superar las defensas de las tropas leales a Moammar Gadhafi e ingresar al complejo Bab al-Aziziya de Gadhafi, mientras enfrentan duros combates.
Los rebeldes capturaron algunas armas de las tropas leales al líder libio y aseguran haber tomado el control del edificio mientras buscan a Gadhafi, su familia y sus asesores más cercanos.
Una densa columna de humo se levanta del complejo de Gadhafi, mientras los rebeldes comienzan a avanzar edificio por edificio. Expertos militares esperan que haya fuerte resistencia, túneles y trampas.
Se intensifican los combates en Trípoli, la capital de Libia en particular en torno al complejo del líder libio Moammar Gadhafi, este martes 23 de agosto de 2011, donde las fuerzas rebeldes tratan de mantener la ofensiva, después de que dos de los hijos del líder libio, Moammar Gadhafi, escaparan del control de los opositores.
Los rebeldes lanzaron una ofensiva sobre el complejo Bab al-Aziziya de Gadhafi y sostienen que lograron sitiar el lugar, y que han conseguido derribar uno de los accesos.
También se desarrollan intensos combates en los alrededor del aeropuerto internacional de Trípoli por el control del estratégico lugar y los rebeldes aplican todo su poder de fuego en el enfrentamiento, según informan los corresponsales en el lugar.
Mientras tanto, los aviones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), realizaron vuelos rasantes sobre el complejo que se presenta muy afectado por bombardeos anteriores y donde este mismo martes 23 de agosto de 2011 se podían escuchar explosiones en su interior.
En una rueda de prensa este mismo martes por la mañana, el coronel Roland Lavoie, portavoz de la OTAN, dijo que en opinión de la alianza Atlántica, "el régimen de Gadhafi ya ha pasado el punto de quiebre y ahora solamente queda saber cuando caera". También el portavoz dijo que las operaciones actuales en un área "urbana como es Trípoli, son más complejas" para la fuerza aérea de la alianza.
Los "francotiradores, morteros, misiles" de Gadhafi, "no pueden cambiar el rumbo de la historia" en Libia, dijo el coronel Lavoie.
Un día antes, portavoces del departamento de Estado de Estados Unidos, habían usado la misma expresión, en referencia que "sólo es cuestión de tiempo para que el régimen de Gadhafi caiga".
Mientras tanto, se informa que miles de residentes abandonan Trípoli en vehículos desbordados de personas y pertenencias.
Ataque rebelde
Horas después de que Seif al-Islam, el hijo de Gadhafi que actuaba como una suerte de primer ministro, dirigiendo al gobierno de Libia día a día, apareciera desafiante y con palabras despectivas contra la Corte Criminal Internacional, los rebeldes atacan el complejo Bab al-Aziziya de Gadhafi.
También en otras partes de la ciudad se escuchan explosiones y descargas de armas pesadas, mientras los rebeldes insisten en que tienen el control de la mayor parte de la capital.
La Corte Criminal Internacional, que el domingo 21 de agosto de 2011 había confirmado la capital de Seif al-Islam, aclaró este martes 23 de agosto, que nunca recibió una confirmación oficial del Consejo Nacional de Transición (CNT).
Por su parte, el presidente del CNT, Mustafa Abdel Jalil, diijo que si Gadhafi es capturado recibirá un juicio justo y que “el momento de victoria real” para los rebeldes será cuando al líder libio.
Mientras tanto, la Organización Internacional de Migraciones, dijo este martes 23 de agosto de 2011, que los combates que se registran en Trípoli, han forzado a retrasar el arribo de un trasbordador que debía atracar en el puerto para realizar evacuaciones.
El barco que puede transportar hasta a 300 personas, permanecerá en aguas abiertas hasta que la situación mejore.
En tanto, las fuerzas pro Gadhafi aún mantienen el control de dos ciudades, Sabha en el sur y Sirte, ubicada a unos 450 kilómetros al este de la capital en la zona costera. Ambas ciudades se encuentran en la zona tribal de la cual el líder libio es originario.
Las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), dijeron que las fuerzas pro Gadhafi dispararon tres misiles Scud contra Misrata sin provocar víctimas. También existe preocupación sobre el destino del amplio arsenal de que dispone Gadhafi.
