“Necesitamos una reforma migratoria completa, y la necesitamos ya”, declaró el senador Robert Menéndez, durante una de las sesiones de la Conferencia de Política Pública del Instituto de la Junta de Hispanos del Congreso.
Menéndez fue muy específico al explicar lo que “ya” significa. Explicó que, de no ser aprobada una reforma entre finales de este año y el primer trimestre del próximo, sería muy difícil que se aprobara durante la presidencia de Barack Obama porque en el 2010 habrá elecciones para elegir congresistas y gobernadores y después sólo quedará la mitad del mandato de Obama.
En el plenario también participaron Alejandro Mayorkas, director del Servicio de Inmigración y Ciudadanía de Estados Unidos, Cecilia Muñoz, directora de asuntos intergubernamentales de la presidencia nacional, Lydia Tamez, representante de la empresa Microsoft, y Luis V. Gutiérrez, congresista del estado de Illinois.
Gutiérrez expresó que la comunidad inmigrante debe exigir que Obama cumpla una de las promesas que hizo durante su campaña para la presidencia: que reformaría el sistema migratorio del país.
Muñoz expuso que la presidencia entiende que es importante aplicar las leyes de inmigración—deportar a indocumentados, por ejemplo— pero que también saben que es importante la manera en que se hace, agregando que este gobierno se está enfocando en castigar a los empleadores que contraten a indocumentados en vez de buscar castigar a los empleados solamente.
Gutiérrez y Menéndez recalcaron que la aplicación práctica de la ley tiene consecuencias que violan los derechos civíles incluso de algunos ciudadanos estadounidenses, como es el caso cuando se deportan padres indocumentados y así se separan familias que cuentan con algunos miembros que son indocumentados y otros que son residentes legales o ciudadanos.
Los panelistas también hablaron sobre cómo el debate de la reforma migratoria se ha incorporado al controversial debate del plan de reforma del cuidado de salud ya que a algunos estadounidenses les preocupa que el plan que propone Obama pueda dejar espacio para ayudar a los indocumentados.
“La comunidad latina está sufriendo” por prácticas discriminatorias cuando se realizan redadas y por prejuicios que algunos sectores de la población manifiestan contra ella, dijo Menéndez, el único hispano en el Senado de Estados Unidos.
El senador agregó que es importante que la población hispana del país defienda sus derechos y exija el respeto que se merece.
“No somos ciudadanos de segunda clase”, dijo.
Varios asistentes de la sesión dijeron que los puntos de vista que fueron expuestos resultaron en una discusión balanceada sobre el tema.
El plenario fue parte de una conferencia de tres días que reúne a líderes de todo Estados Unidos para hablar sobre temas de importancia para la comunidad hispana en el país. Este año, los temas incluyen la fuerza laboral latina en la economía del siglo XXI, liderazgo latino en el campo de la educación, retos en el campo de relaciones internacionales con Latinoamérica, el impacto de la reforma de salud en la comunidad latina y la educación temprana de los niños latinos.
La conferencia es parte de los eventos organizados por el Instituto de la Junta de Hispanos del Congreso (CHCI) con motivo del Mes de la Herencia Hispana.
El miércoles se llevará a cabo una cena a la que asistirá el presidente Obama y la primera dama Michelle Obama y se otorgarán premios a varios líderes latinos en varios campos, incluyendo al cantante Marc Anthony por sus contribuciones a la promoción de la música latinoamericana.