Dos limpiadores de ventanas que quedaron colgando de un andamio en el World Trade Center el miércoles dijeron que volverían al trabajo.
Juan López y Juan Lizama quedaron colgando cuando un cable del andamio en el que trabajaban cedió en la torre de 104 pisos.
Lizama dijo que no dudaría si le ofrecieran retornar a la labor donde por poco pierde la vida.
“Este trabajo me ha dado todo para mi familia, todo para mí. Es por eso que digo que Dios bendiga a Estados Unidos'', dijo Lizama, de 41 años. “Estoy muy feliz de estar aquí”.
Pero López, de 33 años, dijo que preferiría un trabajo más cercano al suelo.
“Hay otras opciones para los limpiadores de ventanas”, dijo según la AP. “Empleos de la planta baja. ... Probablemente voy a hacer eso”.
Al recordar el momento del accidente, López dijo que sorprendentemente sabía que eventualmente serían rescatados.
“En el principio era el pánico”, relató, “[Pero] sabíamos que todo y todos estaban seguros alrededor nuestro, debajo de nosotros. Una vez que vi el cuerpo de bomberos y la policía de Nueva York en el interior, supe que era sólo una cuestión de tiempo”.
Lizama dijo que se asustó un poco cuando el andamio se inclinó a 68 pisos de altura, pero agregó que “siempre estábamos en control de la situación”.
Lizama dijo que llamó por celular a su esposa para decirle que estaba bien.
Ambos hicieron hincapié en la importancia de su capacitación en seguridad.
“Lo sé, este trabajo, la seguridad es lo primero”, dijo Lizama, salvadoreño de nacimiento. “Un error y no estoy aquí”.
Las autoridades no han determinado la causa del problema.
