El presidente en disputa de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió a los demás países su ayuda para enfrentar los ataques “injustificables” luego de que la justicia estadounidense lo acusara a él y a otros funcionarios de su gobierno por narcotráfico y terrorismo.
La carta fue leída por Jorge Arreaza, canciller del gobierno en disputa, en la televisora oficial. Aseguró que en el texto, Maduro denuncia las “infamias del gobierno de los EE.UU.” y los ataques “extravagantes” de la administración de Donald Trump.
En la carta, de cinco páginas, Maduro califica la presentación de los cargos como “ilegales” y asegura que pretende “sustentar una falaz acusación de narcotráfico y terrorismo, con el único objetivo de simular la supuesta judicialización de las autoridades venezolanas”.
Señala que el gobierno estadounidense “parece decidido a profundizar su política de agresión contra Estados soberanos de la región, y en especial contra el pueblo venezolano”.
En el texto se menciona a otro de los funcionarios acusados, Cliver Alcalá, ex jefe militar quien estaba en el exilio en Colombia pero se habría entregado a las autoridades estadounidense.
En el texto, el presidente en disputa de la nación suramericana asegura que Alcalá es un “mercenario contratado por Estados Unidos para llevar a cabo una operación terrorista en contra del gobierno venezolano” y que su entrega se trataría de un “rescate de alguien a quien consideran un agente estadounidense”.
Además de solicitar “su invalorable apoyo ante esta insólita y arbitraria persecución”, Maduro indicó que estaba dispuesto a “sostener una relación de respeto y cooperación con todas las naciones”, especialmente en el marco de la pandemia de COVID-19.
El gobierno de EE.UU. presentó el jueves 26 de marzo cargos contra Maduro y otros funcionarios de alto rango de su gobierno por supuestos vínculos con el narcotráfico y ofreció una recompensa de 15 millones de dólares por su captura.