Funcionarios pakistaníes informaron del ataque con un presunto misil estadounidense que mató a al menos ocho militantes, incluyendo cinco alemanes, en la región tribal del noroeste de Pakistán.
Según las fuentes, un avión no tripulado disparó dos misiles contra un edificio en la población de Mir Ali, en Waziristan del Norte.
“Tenemos fuertes e importantes relaciones con Afganistán, y Pakistán es un fuerte aliado en la búsqueda común de resolver el extremismo y la amenaza que significa”, aseguró el secretario de Prensa de la Casa Blanca, Robert Gibbs, ante la pregunta sobre si cree que Pakistán y Afganistán son fuertes aliados en la lucha contra los talibanes y al-Qaeda. Sin embargo, declinó hacer ningún comentario sobre el anterior ataque de un avión no tripulado.
Se ha identificado un foco terrorista en el noroeste de Pakistán que podría estar vinculado con redes de al-Qaeda en diversas ciudades de Gran Bretaña, Francia y Alemania.
En los últimos meses, Estados Unidos ha aumentado sus ataques con aviones no tripulados contra objetivos de al-Qaeda y grupos talibanes en la región tribal hasta un total de 21 el pasado mes de septiembre.
Si bien, Estados Unidos no ha confirmado los ataques, que según Pakistán son una violación a su soberanía.
Ayer, Suecia se sumó a Japón, Gran Bretaña y Estados Unidos en la advertencia a sus ciudadanos sobre posibles ataques terroristas en Europa.
