El presidente de México, Enrique Peña Nieto, dijo querer mantener buenas relaciones con la entrante administración del presidente Trump, pero repitió que México no pagará el muro fronterizo en la frontera entre su país y Estados Unidos.
“Todos los temas que definen nuestra relación bilateral están sobre la mesa, incluyendo seguridad, migración y comercio”, dijo Peña Nieto a un grupo de embajadores.
Pero dijo que México “por supuesto que no pagará” por el muro que Trump quiere construir para ayudar a detener la llegada de indocumentados a Estados Unidos.
“En ningún momento aceptamos cualquier cosa que vaya en contra de nuestra dignidad como país y nuestra dignidad como mexicanos”, remarcó.
Trump insistió el miércoles que sigue adelante con la idea de construir el muro, y que si bien en un principio será el Congreso estadounidense el que apruebe los fondos para su construcción, eventualmente será México quien cargue con la cuenta.
"Podría esperar un año y medio hasta que terminemos nuestras negociaciones con México, las cuales empezarán de forma inmediata tras llegar a la Casa Blanca; pero no quiero esperar", señaló Trump en la conferencia de prensa.
"México, de alguna forma, nos reembolsará por el costo del muro. Eso ocurrirá, sea a través de un impuesto o un pago. Es menos probable que sea un pago, pero ocurrirá", agregó.
Trump también ha amenazado con imponer grandes impuestos a las compañías que se trasladen a México y que traten de vender vender en EE.UU. lo que producen al otro lado de la frontera. Peña Nieto dijo rechazar esos esfuerzos de influir en las inversiones extranjeras con “miedos y amenazas”.
Pero el mexicano, quien planea reunirse muy pronto con Trump, dijo que, en general, quiere mantener relaciones saludables con el nuevo presidente, incluyendo un acuerdo comercial que beneficie a ambos países.
Trump ha amenazado con deshacer el tratado de Libre Comercio existente porque argumenta que beneficia más a México que a EE.UU.