El bosnio serbio Ratko Mladic, sospechoso de crímenes de guerra, pasó su primera noche en una celda aislada en La Haya, donde deberá esperar para enfrentar un juicio por cargos de genocidio.
Un convoy de cuatro vehículos trasladó el martes 30 de mayo a Mladic, de 69 años, a la prisión, mientras un helicóptero sobrevoló el operativo. Ese mismo martes fue extraditado a Holanda desde Belgrado.
El viernes 3 de mayo comparecerá por primera vez ante los jueces del Tribunal Penal Internacional (TPI), quienes preguntarán a Mladic si se declara culpable o inocente de los cargos imputados.
Mladic fue detenido en Serbia luego de 16 años de mantenerse prófugo. Ahora está detenido en el mismo centro donde se halla su otrora socio político, Radovan Karadzic, quien actualmente enfrenta juicios por crímenes de guerra.
Mladic es acusado de la masacre de 8.000 hombres musulmanes en Srebrenica, en 1995, lugar donde se suponía era un sitio seguro controlado por la ONU.
