La incertidumbre política con la enfermedad del mandatario Hugo Chávez y la falta de liderazgo en la toma de algunas decisiones ha hecho que la agencia calificadora de riesgos Moody's cambie la calificación de bonos del Gobierno de Venezuela a negativa.
La agencia dijo que "Venezuela está fuertemente expuesta a un riesgo de transición a causa de la debilidad de sus instituciones, junto con la concentración del poder en la persona del presidente Chávez".
La calificadora de riesgos puso en manos de un eventual “nuevo presidente” la realización de ajustes significativos de políticas para reducir los desequilibrios y las distorsiones macroeconómicas.
"La previsión podría estabilizarse si el nuevo presidente demuestra que ha consolidado su autoridad e implementa suficientes cambios en las políticas actuales para estabilizar a la economía", dijo.
Una de las grandes decisiones que deben tomarse en Venezuela es la rebaja del valor de la moneda -que en Venezuela está sometida desde hace una década a un estricto sistema de tipo fijo frente al dólar.
El bajo nivel de las reservas internacionales liquidas en el Banco Central de Venezuela es palpable en la falta de desabastecimiento de productos de uso diario, para los cuales no hay dólares con que importarlos.
Pero una devaluación, si bien disminuiría el déficit público, tendría un impacto inevitable en los precios que pagan los consumidores por los bienes.
"Dependiendo de la velocidad con la que eventos se desarrollen en el futuro, la calificación y la previsión podrían revisarse antes de la expiración del horizonte de tiempo de 12-18 meses que normalmente se asocia con un pronóstico", sentenció Moody's.
La agencia dijo que "Venezuela está fuertemente expuesta a un riesgo de transición a causa de la debilidad de sus instituciones, junto con la concentración del poder en la persona del presidente Chávez".
La calificadora de riesgos puso en manos de un eventual “nuevo presidente” la realización de ajustes significativos de políticas para reducir los desequilibrios y las distorsiones macroeconómicas.
"La previsión podría estabilizarse si el nuevo presidente demuestra que ha consolidado su autoridad e implementa suficientes cambios en las políticas actuales para estabilizar a la economía", dijo.
Una de las grandes decisiones que deben tomarse en Venezuela es la rebaja del valor de la moneda -que en Venezuela está sometida desde hace una década a un estricto sistema de tipo fijo frente al dólar.
El bajo nivel de las reservas internacionales liquidas en el Banco Central de Venezuela es palpable en la falta de desabastecimiento de productos de uso diario, para los cuales no hay dólares con que importarlos.
Pero una devaluación, si bien disminuiría el déficit público, tendría un impacto inevitable en los precios que pagan los consumidores por los bienes.
"Dependiendo de la velocidad con la que eventos se desarrollen en el futuro, la calificación y la previsión podrían revisarse antes de la expiración del horizonte de tiempo de 12-18 meses que normalmente se asocia con un pronóstico", sentenció Moody's.