Las sobrevivientes de una cárcel clandestina que funcionó como centro de detención, tortura y exterminio, e instalada en la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA), en Argentina, han elevado sus voces para mantener viva la memoria histórica y hoy las hacen sonar en una exposición abierta en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Videos, fotografías y textos reflexivos sobre el encarcelamiento, la maternidad en condiciones insalubres y las salas de tortura que albergó el centro se muestran en la exposición 'Ser mujeres en la ESMA' para documentar uno de los hechos más oscuros de la historia reciente argentina, cuando una junta militar gobernó con mano de hierro el país entre 1976 y 1983.
A través de un video compartido con la audiencia para la apertura de la sala este miércoles, Graciela García, sobreviviente reflexionaba sobre la vuelta "al lugar espantoso" donde estuvo recluida e incomunicada con los suyos durante dos años en pleno apogeo del centro.
En la actualidad el espacio alberga el Museo Sitio de la Memoria ESMA, que ha prestado la muestra itinerante a la OEA, luego de gestiones hechas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para mostrar durante este mes de marzo esas piezas en Washington.
"Permanecí dos años en este centro que fue desgraciadamente el lugar de asesinatos, de perverción y de la cobardía de las fuerzas armadas y en particular del fracaso de la marina", recueda Graciela.
La presidenta de la CIDH, Julissa Mantilla, trae a colación los méritos del trabajo realizado por la Comisión a finales de 1979, que hizo una visita al país para observar la situación de los derechos humanos y registró más de 5.800 denuncias entre estas la situación de las mujeres detenidas en la sede del ESMA.
La titular de CIDH cree que los sucesos del ESMA "son un testimonio vigente, vivo y pendiente" y que el trabajo de mostrar lo ocurrido con "la recuperación de las voces ocultas de las mujeres y las luchas de las que si hablaron, pero no fueron escuchadas", es prioritario en el presente.
La embajadora alterna de Argentina ante la OEA, María Cecilia Villagra, dijo que traer esta temética de la momoria histórica a la actualidad "es importantísimo" y cuando se contextualiza en la situación de las mujeres es aún más.
"La situación de las mujeres durante el terrorismo de Estado y las víctimas" no se debe olvidar porque los riesgos de repetición son constantes -explicó la funcionaria- que reconoció los grandes avances de su país en este proceso de reconocimiento de los hechos históricos, pero alertó ante el creciente movimiento de "la negación" que toma fuerza no solo en Argentina sino en otros países latinoamericanos y del mundo.
Esta exhibición 'Ser mujeres en la ESMA' permanecerá abierta hasta el 31 de marzo en la sede principal de la OEA.
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