Las actividad de Naciones Unidas genera casi $3.690 millones de dólares al año para la economía de la ciudad de Nueva York, según un informe de la Alcaldía de esta ciudad.
El estudio, el primero de este tipo que desarrollan las autoridades locales en dos décadas, se basa en cifras de 2014 y se estima que esta millonaria suma es el aporte total de la organización a la economía de la ciudad.
Ese número tiene en cuenta los salarios que reciben los empleados de la ONU y los de las embajadas y el gasto que efectúan, los pagos que Naciones Unidas hace directamente a empresas de la zona o el dinero que dejan en la ciudad quienes visitan la institución.
La ONU emplea directamente a unas 16.000 personas en Nueva York y, según el estudio, genera unos 9.000 más de forma indirecta.
El informe destaca que la presencia de la organización tiene también un impacto positivo en las arcas municipales, que en 2014 obtuvieron unos $110 millones de dólares por impuestos asociados a su actividad.
Ello ocurrió a pesar de la exención fiscal de la que disfruta Naciones Unidas y que hizo que la ciudad dejase de ingresar ese año unos $99 millones de dólares en impuestos, según el estudio.
Mientras tanto, la ciudad de Nueva York gasta unos $54 millones de dólares al año para apoyar la actividad de la ONU, incluidos costes de seguridad o de educación para los hijos de los empleados.
En una conferencia de presa, la responsable de Asuntos Internacionales de la Alcaldía, Penny Abeywardena, destacó los beneficios que Naciones Unidas ofrece a la ciudad, no solo desde el punto de vista económico.
"La ONU es parte de nuestra comunidad", subrayó Abeywardena, destacando el carácter internacional que la organización aporta y recordando que uno de cada tres neoyorquinos nació fuera de EE.UU.
"La ciudad de Nueva York no es solo una capital económica y cultural, sino también diplomática. Estamos orgullosos de ser la ciudad anfitriona de la sede de la ONU y de la mayor comunidad diplomática del mundo", añadió en un comunicado el alcalde, Bill de Blasio.