El gobierno de Estados Unidos volvió a condenar el jueves la ola de violencia y represión que se vive en Nicaragua e hizo un llamado al gobierno del presidente Daniel Ortega para que “cese de inmediato la brutal campaña de violencia contra su propio pueblo”.
El consejero para asuntos de América Central del Departamento de Estado de EE.UU., Todd Robinson, a través de una conferencia telefónica, hizo un llamado a la comunidad internacional para que se mantenga unida y responda a lo que llamó “estas acciones nefastas” en referencia a los últimos ataques ocurridos el miércoles en la ciudad de Masaya en Nicaragua.
Robinson resaltó las sanciones contra funcionarios nicaragüenses para cerrarles el ingreso al sistema financiero estadounidense y la revocación de visas, pero indicó que no se descartan más sanciones y que por el momento EE.UU. está estudiando todas las opciones.
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De igual manera, el funcionario estadounidense reiteró que el camino para la paz duradera en Nicaragua siguen siendo las elecciones “justas y transparentes” y pidió al presidente Ortega que “se una a los diálogos de paz y se inicien las negociaciones de buena fe”.
Al respecto, el embajador Robinson expresó: “seguimos exhortando a que otros se unan al llamado internacional por la paz” y si “Canadá, México y la UE podrían seguir nuestras acciones sería excelente. Nuestras sanciones son muy importantes y efectivas”, acotó el diplomático.
Todd Robinson también reconoció los esfuerzos de la Organización de los Estados Americanos (OEA), como la aprobación de la resolución que condena las violaciones de derechos humanos en Nicaragua y aseguró que Estados Unidos seguirá trabajando con la comunidad internacional para que se reinicie el diálogo en Nicaragua y se frene la violencia.
Sobre si EE.UU. ha registrado un aumento en el ingreso de inmigrantes nicaragüenses que huyen de la violencia, el diplomático estadounidense dijo que hasta el momento no ha visto un incremento, pero que los países alrededor de Nicaragua, como Costa Rica, podrían estar pasando por esta situación.
En cuanto a la posibilidad de recomendar a otros países sobre el retiro de sus funcionarios diplomáticos de Nicaragua, el consejero Robinson indicó que “no han contemplado” esa posibilidad, pero que en todo caso debería ser una "decisión soberana" de cada país.
“La solución para el gobierno nicaragüense es clara. El único y mayor camino para la paz duradera es celebrar elecciones libres y transparentes. Son ellos los que deben tomar esa decisión”, finalizó Todd Robinson.
