Una astronauta estadounidense y dos cosmonautas rusos llegaron este miércoles a la Estación Espacial Internacional en una nave Soyuz lanzada desde el Cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, que probó una nueva maniobra para llegar a su objetivo en solo tres horas.
Kate Rubins, una microbióloga de la NASA, y los cosmonautas rusos Sergey Ryzhikov y Sergey Kud-Sverchkov sustituirán en la estación espacial a Chris Cassidy, Anatoli Ivanishín e Ivan Vagner, cuyo regreso a la Tierra está previsto para el 22 de octubre.
La tripulación puso a prueba por primera vez una maniobra de dos órbitas que le permitió alcanzar la estación en la mitad del tiempo de otras misiones.
Desde que el programa de los transbordadores espaciales terminó en 2011, la NASA ha estado enviado a sus astronautas a la Estación Espacial en las naves rusas, pero recientemente inició una nueva era con el lanzamiento de naves Crew Dragon de SpaceX, que comenzó con una exitosa misión en agosto.
La próxima misión de SpaceX está planeada para noviembre, con los astronautas de la NASA Mike Hopkins, Victor Glover, Shannon Walker, y Soichi Noguchi, de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón.
En una conferencia de prensa en la víspera del despegue, Rubins informó que la tripulación guardó semanas de cuarentena en el centro de entrenamiento Star City, a las afueras de Moscú, y después en Baikonur para evitar cualquier amenaza de coronavirus.