China amenazó con tomar represalias contra Estados Unidos después de la decisión del presidente Donald Trump de iniciar el proceso de eliminar el estatus especial de Hong Kong e imponer restricciones a los estudiantes chinos en territorio estadounidense.
Las acciones de Trump fueron en respuesta a una nueva ley de seguridad nacional impuesta por Beijing en Hong Kong.
En palabras a los reporteros este lunes durante una conferencia de prensa diaria, el portavoz de la Cancillería china, Zhao Lijian, dijo que “las medidas anunciadas interferirán gravemente en los asuntos internos de China, dañarán las relaciones chino-estadounidenses y perjudicarán a ambos países”.
China “se opone firmemente a esto”, añadió el portavoz, y advirtió que “todas las palabras o acciones de Estados Unidos que dañen los intereses de China enfrentarán un contraataque firme”.
Trump dijo el viernes que la polémica ley de seguridad es trágica para el pueblo de Hong Kong y viola la promesa de China de proteger la autonomía de la antigua colonia británica.
Agregó que el gobierno chino ha estado “disminuyendo el prolongado estatus de la ciudad”.
El presidente, sin embargo, no suspendió de inmediato los privilegios que han ayudado a Hong Kong a perdurar como un centro financiero global.
El parlamento de China votó la semana pasada a favor de imponer la nueva ley de seguridad nacional en Hong Kong, que prohíbe actividades secesionistas y subversivas, y lo que considere interferencia extranjera y terrorismo.
Unas 200 figuras políticas de todo el mundo han dicho que la nueva ley constituye una “flagrante violación” de la Declaración Conjunta que devolvió la excolonia británica a China en 1997 bajo el marco de “un país, dos sistemas”.
