El papa Francisco dijo el domingo que estaba feliz de estar de regreso para saludar a los fieles en la Plaza de San Pedro para su tradicional bendición del mediodía, después de semanas de restricciones debido al coronavirus.
Durante las últimas semanas, el papa dio su mensaje de pie desde un atril dentro del palacio, que se trasmitía por televisión, radio e internet.
A finales de abril, Italia comenzará a levantar gradualmente algunas restricciones impuestas debido a la pandemia, permitiendo, por ejemplo, el servicio al aire libre en cafés y restaurantes en áreas del país donde ha habido indicios de aminorar el COVID-19.
Unas 200 personas, incluidas monjas y familias, que se encontraban a una distancia prudencial en la vasta plaza, acudieron a ver al papa hablar desde una ventana del Palacio Apostólico.
"Gracias a Dios y gracias por su presencia", dijo Francisco a quienes se presentaron a pesar de las nubes que amenazaban con un aguacero en Roma.
Tensiones entre Rusia y Ucrania
El Papa Francisco expresó su preocupación por la reciente acumulación de tropas rusas cerca de la frontera con Ucrania y pidió esfuerzos para aliviar las tensiones en el conflicto de 7 años en el este de Ucrania que enfrenta a las fuerzas ucranianas contra los rebeldes respaldados por Rusia.
Las autoridades ucranianas dicen que las violaciones del alto el fuego se han vuelto más frecuentes en las últimas semanas. Acusaron a Rusia de alimentar las tensiones al desplegar 41.000 soldados cerca de la frontera con Ucrania y 42.000 en Crimea, donde Rusia mantiene una gran base naval.
Francisco dijo el domingo a los peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro que esperaba que "se hagan gestos capaces de promover la confianza recíproca y favorecer la reconciliación y la paz que son tan necesarias y tan deseadas".
Con información de AP