El mayor impacto de los ataques del 9/11 fue para Nueva York y es un hecho irrefutable que la vida de sus ciudadanos cambió para siempre.
Rafael Espinal es concejal municipal de Nueva York y representa al distrito 37 de Brooklyn, y en entrevista con la Voz de América recordó ese momento y la forma en la que marcó su vida.
“Yo tenía 17 años y estaba en colegio, pasando clases, y de pronto nos dijeron que dos aviones se habían estrellado contra las Torres Gemelas. El sentimiento en ese momento fue de sorpresa porque nunca imaginamos que fuera terrorismo”, recuerda Espinal.
“Luego vino la conmoción, salimos de la escuela y yo junto un grupo de muchachos latinos protegimos a compañeros árabes que estaban por allí porque la gente en su furia quería agredirles”, dice el concejal municipal.
“El momento fue de gran conmoción, lo primero era buscar a la familia y yo tenía un hermano que estaba en una escuela cerca de la zona cero, horas más tarde gracias a Dios el llegó a casa sano y salvo, pero con la gran impresión de la tragedia”, afirma Espinal.
Sobre el impacto de ese hecho sobre la vida diaria de los newyorkinos, Espinal recuerda que después de esos ataques vino una época muy difícil.
“El impacto en la economía fue inmediato, la gente perdió a sus seres queridos, se quedaron sin trabajo y con un gran sentimiento de dolor y desconfianza, pero jamás perdieron su espíritu solidario y de lucha para vencer la adversidad”, remarca Espinal.
El tiempo pasó y tras 15 años, el concejal Espinal afirma que Nueva York es otra vez la gran metrópoli que acoge a todos y les brinda oportunidad para crecer y vivir en paz.
“Ahora cuando vemos la zona cero sentimos orgullo, la Freedom Tower que se levanta allí es la muestra de lo que se puede lograr, ese lugar tiene mucha mano de obra latina y es la que apoya el desarrollo”, afirma el concejal de Nueva York.
“Por eso, tenemos que tener mucho cuidado con lo que digamos en este período electoral porque Estados Unidos es un país de inmigrantes y ellos confían en esta nación en la que pueden vivir en libertad”, concluye este joven político estadounidense de origen dominicano.