Las fuerzas israelíes lanzaron este miércoles nuevos ataques aéreos en los suburbios del sur de Beirut contra lo que el Ejército dijo que eran objetivos de Hezbolá, mientras que el grupo militante dijo que se enfrentó con tropas israelíes que intentaban infiltrarse en la ciudad de Adaisseh.
Los combates continuaron mientras el Consejo de Seguridad de la ONU se preparaba para discutir el creciente conflicto en la región, que incluyó ataques con misiles iraníes dirigidos a Israel el día anterior.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, condenó el ataque iraní en una declaración emitida el martes por la noche, calificándolo de “acto de agresión escandaloso”.
Austin pidió a Irán y a sus grupos aliados en la región que “detengan cualquier ataque futuro”.
“Nunca dudaremos en proteger nuestras fuerzas e intereses en el Oriente Medio y en apoyar la defensa de Israel y nuestros socios en la región”, dijo Austin.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo que los gobernantes de Irán cometieron un "gran error" al organizar un ataque con misiles a gran escala contra su nación y advirtió que "pagarán por ello".
Desde Irán, en una entrada en la red social X, el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Abbas Araqchi, escribió: "Nuestra acción ha concluido a menos que el régimen israelí decida invitar a nuevas represalias. En ese escenario, nuestra respuesta será más fuerte y poderosa".
Funcionarios israelíes y estadounidenses dijeron que Irán disparó alrededor de 200 misiles balísticos contra amplias zonas de Israel después del anochecer del martes. La mayoría fueron interceptados por fuerzas israelíes con la ayuda de buques de guerra de Estados Unidos, el principal aliado de Israel.
El ataque fue una importante escalada del conflicto que dura un año entre Israel y los representantes regionales de la república islámica.
Los videos publicados en internet muestran que algunos misiles iraníes impactaron en Israel, mientras que otros cayeron en la vecina Jordania. No hubo informes inmediatos de víctimas israelíes en el ataque.
Horas antes, el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, dijo en X que Irán había dado una "respuesta decisiva a la agresión del régimen sionista", un término peyorativo para Israel.
"Esta acción fue en defensa de los intereses y los ciudadanos de Irán. Que Netanyahu sepa que Irán no es un país beligerante, pero que se opone firmemente a cualquier amenaza... No entre en un conflicto con Irán", escribió Pezeshkian.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el martes en una rueda de prensa en la Casa Blanca: "Por orden mía, el ejército de Estados Unidos apoyó activamente la defensa de Israel. Todavía estamos evaluando el impacto, pero según lo que sabemos ahora, el ataque parece haber sido derrotado e ineficaz".
Biden dijo que la frustración de lo que llamó el "descarado" y esperado ataque de Irán era un testimonio de las capacidades militares israelíes y estadounidenses y de su intensa planificación.
"No se equivoquen, Estados Unidos apoya total, totalmente, totalmente a Israel", añadió.
En una reunión informativa con periodistas, el portavoz del Pentágono estadounidense, mayor general Pat Ryder, dijo que dos destructores estadounidenses, el USS Cole y el USS Bulkeley, dispararon alrededor de una docena de interceptores contra misiles balísticos iraníes durante el ataque.
"Esperamos que no haya otro ataque", dijo Ryder. "Pero es evidente que Irán mantiene una capacidad y acaba de demostrar que está dispuesto a utilizarla para atacar directamente a Israel. Por eso, seguiremos consultando estrechamente con Israel sobre los próximos pasos".
En su intervención en las Naciones Unidas, el embajador israelí ante el organismo mundial, Danny Danon, afirmó que la respuesta de Israel al ataque iraní sería "dolorosa". Afirmó que el pueblo iraní comprendería que la respuesta israelí no sería contra ellos, sino contra sus gobernantes islamistas radicales.
El ejército israelí dijo que 10 millones de civiles estaban bajo amenaza por los misiles iraníes, que hicieron sonar las sirenas en el norte, centro y sur de Israel. Aproximadamente una hora después de que comenzara el ataque con misiles, el portavoz militar israelí Daniel Hagari dijo que había terminado y que los civiles podían abandonar sus refugios.
La agencia de noticias estatal iraní IRNA dijo que la principal fuerza militar de Irán, la Guardia Revolucionaria Islámica, atacó objetivos de "seguridad e inteligencia" israelíes en represalia por el asesinato en julio del líder palestino de Hamas, Ismail Haniyeh, en Teherán y los recientes asesinatos por parte de Israel de altos comandantes del Hezbolá libanés y del propio CGRI.
El viernes pasado, Israel mató al jefe de Hezbolá, Hassan Nasralá, en un ataque contra el centro de mando del grupo terrorista en el sur de Beirut, designado por Estados Unidos. El general de brigada Abbas Nilforoushan del CGRI también murió en ese ataque. Israel no ha confirmado ni negado el asesinato de Haniyeh.
IRNA dijo que el ataque con misiles del martes contra Israel, el segundo ataque de este tipo desde territorio iraní después de un asalto aéreo en abril, fue aprobado por el Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán, que sirve bajo el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei.
[En este informe contribuyeron Michael Lipin, la corresponsal de la VOA en el Pentágono, Carla Babb, la corresponsal de la VOA en la ONU, Margaret Besheer, y la corresponsal de la VOA en la Casa Blanca, Anita Powell.]
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