Doce personas fueron acusadas de mantener una gran operación de fraude inmigratorio a través de una firma de abogados de la ciudad de Nueva York, según informaron las autoridades.
Supuestamente, los acusados y sus cómplices solicitaron el estatus legal para miles de inmigrantes ilegales justificando contratos laborales bajo falsos auspicios de empleadores estadounidenses, según precisaron los fiscales citados por los medios locales de Nueva York.
La operación, en la que ya se han arrestado a 27 personas, habría recaudado millones de dólares.
El presunto cabecilla, Earl Seth David, suspendido del ejercicio de la abogacía desde 2004, fue apresado en Canadá, donde había huido en 2006 al enterarse de que su firma estaba siendo investigada.
Según las autoridades, habría seguido recaudando los beneficios del fraudulento negocio desde su ubicación en Canadá. Si bien, los fiscales dijeron que la firma estaba radicada en Manhattan y operaba varias empresas ficticias.