El presidente Barack Obama volvió al Congreso para que apruebe el acuerdo de 12 naciones de la Cuenca del Pacífico, conocido como TPP por sus siglas en inglés.
Obama dijo que es EE.UU. y no China el que debe fijar las reglas del comercio económico en la región del Asia-Pacífico.
En un artículo de opinión en el diario The Washington Post, Obama rechaza los intentos de Beijing y otras 15 naciones para crear una Sociedad Regional Económica Ampliada en Asia que competiría con el Acuerdo de Comercio Transpacífico (TPP), que Estados Unidos firmó con otras 11 naciones del Pacífico.
El líder estadounidense dice que el propuesto acuerdo liderado por China "no evitará la competencia desleal entre empresas o emprendimientos subsidiados por el gobierno", ni garantizará la libertad en internet, la protección de los derechos intelectuales de artistas y escritores, ni hará respetar altos estándares para trabajadores o el medio ambiente.
Barack Obama dice que, por el contrario, el acuerdo que EE.UU. ayudó a forjar brindará esas protecciones y llevará a la eliminación de más de 18.000 aranceles que otros países han impuesto a productos estadounidenses.
"Entiendo el escepticismo que la gente tiene sobre acuerdos comerciales, especialmente en comunidades donde los efectos de la automatización y la globalización han afectado más a trabajadores y sus familias", indica Obama. "Pero construir muros para aislarnos de la economía global solo nos alislará de las increibles oportunidades que ofrece", señala.
En su lugar, propone el presidente, "Estados Unidos debería escribir las normas (comerciales). Estados Unidos debería liderar. Otros países deberían cumplir las reglas que Estados Unidos y sus socios establezcan, y no al contrario", dice Obama.