El presidente Barack Obama ha cancelado dos de las cuatro paradas originales en su viaje a Asia, debido a la paralización del gobierno que podría extenderse si continúa el impasse entre republicanos y demócratas.
El presidente está supuesto a viajar el sábado a Indonesia y Brunei, pero ha suspendido sus visitas a Malasia y a las Filipinas, para estar disponible para la siguiente batalla con el Congreso, cuando se cumpla el plazo para aumentar el techo de la deuda el 17 de octubre.
El viaje es parte de la estrategia de estrechar los lazos con Asia y ya fue cancelado en dos ocasiones anteriores en 2010, una vez para luchar por la reforma de salud y la otra por el derrame de petróleo frente a las costas de Luisiana, en el Golfo de México.
El anuncio de la cancelación fue el corolario de un día infructuoso en el Capitolio, en el que republicanos y demócratas no pudieron acercar posiciones ni resolver sus diferencias.
El presidente Obama acusa a los republicanos de tomar a su gobierno como rehén para sabotear su Ley de cuidados de la salud, el más ambicioso programa social de las últimas cinco décadas en Estados Unidos.
Los republicanos en la Cámara de Representantes ven la ley de Salud como una peligrosa extensión del poder del gobierno y luchan por hacerla inefectiva quitándole fondos para su funcionamiento.
El presidente está supuesto a viajar el sábado a Indonesia y Brunei, pero ha suspendido sus visitas a Malasia y a las Filipinas, para estar disponible para la siguiente batalla con el Congreso, cuando se cumpla el plazo para aumentar el techo de la deuda el 17 de octubre.
El viaje es parte de la estrategia de estrechar los lazos con Asia y ya fue cancelado en dos ocasiones anteriores en 2010, una vez para luchar por la reforma de salud y la otra por el derrame de petróleo frente a las costas de Luisiana, en el Golfo de México.
El anuncio de la cancelación fue el corolario de un día infructuoso en el Capitolio, en el que republicanos y demócratas no pudieron acercar posiciones ni resolver sus diferencias.
El presidente Obama acusa a los republicanos de tomar a su gobierno como rehén para sabotear su Ley de cuidados de la salud, el más ambicioso programa social de las últimas cinco décadas en Estados Unidos.
Los republicanos en la Cámara de Representantes ven la ley de Salud como una peligrosa extensión del poder del gobierno y luchan por hacerla inefectiva quitándole fondos para su funcionamiento.