El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dio a conocer que el presidente Barack Obama se reunirá el viernes con familiares de las víctimas de la masacre en el colegio universitario Umpqua, en Roseburg, Oregon, comoparte de un viaje que tenía "previsto" a la costa occidental del país.
"La visita no requiere cambios significativos en los planes para ir a Oregon y pasar parte del tiempo con las familias de quienes hayan resultado muertos o heridos en el trágico tiroteo que ocurrió la semana pasada", indicó el vocero de la Casa Blanca, quien no anticipó "mucha aparición pública del presidente".
"El propósito de su viaje es estar con los familiares afectados por este atroz acto de violencia”, dijo Earnest.
Entretanto este martes estudiantes todavía afectados por la tragedia regresaron al campus y fueron recibidos por consejeros, perros certificados para terapia y maestros, aunque las clases continúan canceladas hasta la próxima semana.
El alcalde de Roseburg, Larry Rich, un republicano, defensor del derecho a portar armas, recibió con beneplácito la visita del presidente demócrata cuando la Casa Blanca llamó el lunes para preguntar si el mandatario debía viajar a la ciudad.
Rich dice que dijo "Si, él debe venir. Es nuestro presidente y nos encantaría recibirlo". Agregó incluso que si ese día hubiera algún funeral de cualquiera de las víctimas, el presidente asistiría.
El primero de los servicios funerales será el de Jason Johnson, jueves, una semana después de la masacre. Johnson, de 33 años fue asesinado junto con otros siete estudiantes y su profesor de Inglés, por un estudiante de la escuela que padecía una enfermedad mental.
Otras nueve personas resultaron heridas en el tiroteo, en el que el asesino se quitó la vida.
La masacre en el colegio universitario Umpqua, es considerada como el peor ataque masivo en la historia reciente de Oregon.
El tiroteo despertó nuevamente la intensa batalla por el control de armas en Estados Unidos que está protegido por la segunda enmienda de la Constitución.
